Silvina Luna murió a los 43 años y su partida dejó un inmenso dolor en toda la sociedad. La vida de la actriz estuvo marcada por mucha felicidad en su carrera artística, pero también por duros momentos que tuvo que enfrentar como fue la trágica y repentina muerte de sus padres.
Tras el fallecimiento de su padre y meses después de su madre, la rutina de la modelo cambió drásticamente cuando decidió abocarse a terapias para aliviar el dolor por ambas muertes. Luego de estos hechos, Luna consolidó la relación con su hermano quien vivía en Rosario.
Cómo fue la muerte de los padres de Silvina Luna
Fue en el año 2008 cuando la tragedia golpeó a Silvina Luna: primero, Sergio Luna, padre de la actriz, murió de un paro cardíaco mientras viajaba como lo hacía habitualmente hacia su trabajo.
Su fallecimiento fue inmediato y produjo una enorme conmoción en la familia de la modelo, que en ese entonces tenía 28 años.
Cuando intentaban recuperarse del duro golpe, fueron tan solo cinco meses después cuando la madre de Silvina, Roxana Cheri, de 49 años, falleció a causa de un problema gástrico.
Ambos golpes, que se dieron en apenas meses, fue un gran dolor en el alma para Silvina, tal cual ella había dicho en varias entrevistas. “Tanto dolor me hizo crecer de golpe, madurar, valorar la vida. Antes vivía insatisfecha y siempre quería más y más”, había expresado en 2008 en diálogo con la revista Gente.
Tras lo sucedido, la modelo decidió incursionar en diversas prácticas espirituales, como la meditación y el yoga, con el fin de apaciguar el dolor. Años después, contó que ese camino la ayudó a perdonar a sus papás. “Yo los perdono y les agradezco por haberme dado la vida”, dijo en una entrevista en 2002.
La relación de Silvina Luna con su hermano
Las muertes de los padres de Silvina y Ezequiel produjeron que ambos se acerquen y consoliden un vínculo para apoyarse mutuamente en cada una de las instancias de su vida.
Ezequiel viajó de Rosario a Buenos Aires y se instaló para acompañar a su hermana luego de que conociera los problemas de salud que la aquejaron hasta el último día. También, hasta el final, estuvo a su lado.
“Me dicen que permanentemente ella le pide a su hermano por su madre. Que todo el tiempo le menciona a su madre”, dijo semanas atrás Ángel de Brito, conductor de LAM en su programa. “Y por su papá también”, añadió Yanina Latorre.