Se realizó hoy una audiencia solicitada por la Unidad Fiscal Especializada en Delitos Complejos del Centro Judicial Concepción, a cargo de Mónica Garcia de Targa, con el propósito de presentar un acuerdo de juicio abreviado alcanzado con el imputado Alberto Agustín Monteros (22) y su defensor técnico. Se trata de un joven acusado de un violento robo ocurrido en la madrugada del 29 de marzo de este año, en el barrio Cancha Las Carreras de la ciudad de Juan Bautista Alberdi.
Los términos del convenio fueron oralizados por el auxiliar de fiscal, Juan José Ibáñez, quien describió lo sucedido ese día en la vivienda familiar donde se llevó a cabo el ilícito.
En este sentido indicó que, alrededor de las 5.40, Monteros y otro sujeto se presentaron al frente de la casa de las víctimas y comenzaron a arrojar piedras al interior. La dueña de casa salió a ver qué ocurría y el acusado le exigió la entrega de $10.000, amenazándola con que iba a matar a su hijo, esgrimiendo un fierro que tenía en una de sus manos, mientras que su cómplice llevaba un machete. Tras la resistencia de la mujer, ambos se dispusieron a forzar el portón de entrada para luego llevarse una motocicleta.
Minutos más tarde, los sujetos volvieron exigiendo el dinero, esta vez encontrándose con el esposo de la mujer a quien amenazaron también y le robaron el celular.
Por último, una hora después, nuevamente se hizo presente Monteros en el lugar y, junto a otros dos individuos, ingresaron a la casa (estaba sola porque los ocupantes habían ido a hacer la denuncia) y sustrajeron varios electrodomésticos y otros elementos.
Condena
Para hacer efectivo el convenio, Monteros reconoció su autoría y participación en los hechos, calificados como robo agravado por el uso de armas y robo agravado por ser cometido en poblado y en banda. Asimismo las partes convinieron que se le imponga una pena de cinco años de prisión efectiva.
Luego de un cuarto intermedio, la jueza interviniente resolvió hacer lugar al acuerdo pleno de juicio abreviado, dejando firme la sentencia por la renuncia de las partes a cualquier recurso de apelación.