Luis Rubiales, presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), sigue en el ojo de la tormenta. Además del beso a la mediocampista Jenni Hermoso en la entrega de premios del Mundial Femenino, apareció una polémica foto en la que levanta a Athenea del Castillo, jugadora del Real Madrid, en sus hombros.
Asimismo, el beso a Hermoso no fue la única polémica: se lo vio muy efusivo a la hora de saludar a sus jugadoras y tuvo algunos gestos obscenos en el palco de la final.
"Hay un hecho que tengo que lamentar y es lo que ha ocurrido entre una jugadora y yo, con una magnífica relación entre ambos, al igual que con otras, y donde seguramente me he equivocado", dijo Rubiales en su descargo.
Dos referentas del fútbol femenino apuntaron contra Luis Rubiales
Al enterarse de los hechos, Megan Rapinoe, una de las mejores futbolistas de la historia, apuntó contra Rubiales. "Lo ocurrido me hizo pensar en todo lo que tenemos que aguantar. Piensen en el peso que tuvo que cargar la selección española. Algunas jugadoras que se plantaron el año pasado (al protestar por el trato recibido por el entrenador y la RFEF) siguen sin estar con el equipo. A lo mejor es algo que las galvanizó, pero no deberías sentir eso", dijo a The Atlantic.
Y añadió: "Hubo otra imagen que muestra el profundo nivel de misoginia y sexismo en esa Federación y en ese hombre tras el pitido final, simplemente agarrándose la entre pierna. ¿En qué mundo al revés vivimos? En el escenario más grande, en el que deberías estar celebrando, Jenni tuvo que ser físicamente acosada por esa persona".
Del mismo modo, Tamara Ramos, cofundadora del sindicato Futbolistas ON, ya había denunciado a Rubiales en 2017. "No me sorprende en absoluto lo que está pasando, lo conozco desde hace muchos años y le he sufrido", enfatizó en diálogo con la cadena Telecinco.
"Delante de todos él, con la sorna que tiene de reírse, me decía 'venga a ver, que tú has venido aquí a ponerte las rodilleras'. Son palabras que nadie se merece y menos una profesional que ha venido a trabajar. Me dijo: '¿De qué color traes hoy la ropa interior?'", explicó.
Y cerró: "Te sientes tan... siendo mujer en un mundo de fútbol, que somos pocas. Es difícil enfrentarte. Cuando le demandé tenía dos bebés. Lo pasé fatal y me costó mucho hacerlo. Demandé para una rescisión de contrato. Me dijo que si me iba no me daba ni el paro".