La noche de las Perseidas: ¿cuándo será y cómo ver la inédita lluvia de meteoros?

La noche de las Perseidas: ¿cuándo será y cómo ver la inédita lluvia de meteoros?

Una lluvia de estrellas podrá ser más visible gracias a la ausencia de luz de luna.

La noche de las Perseidas: ¿cuándo será y cómo ver la inédita lluvia de meteoros?
11 Agosto 2023

Noches mágicas si las hay se avecinan y los próximos días darán prueba de ello. Sucede que los observadores y observatorios de diferentes partes del mundo se preparan para un fenómeno poco habitual en el cielo que tendrá lugar este fin de semana. Se trata de la noche de las Perseidas, una imponente lluvia de meteoros que deleitará a miles de personas.

Las Perseidas son pequeñas partículas (meteoritos) que ingresan a la atmósfera terrestre a alta velocidad. Al contacto con los gases, estas partículas se friccionan y calientan a muy altas temperaturas, por lo que se “encienden” y se vuelven visibles en el cielo de la noche.

Cuándo y dónde podrá verse la lluvia de meteoros

El fenómeno suele darse entre julio y agosto. Esta vez, tendrá lugar entre mañana a la noche y la madrugada del domingo. Si bien podrá verse casi en la totalidad del globo terráqueo, los habitantes del hemisferio norte tendrán mayor facilidad para captarlos.

En el hemisferio sur, en cambio, quienes quieren ver las “estrellas” movedizas, deberán contar con las condiciones ideales como cielo despejado de nubes y de contaminación y, en el mejor de los casos, poca iluminación en el suelo. Es decir, se podrá apreciar más a las Perseidas desde áreas poco urbanizadas. Contar con un telescopio facilita ampliamente la visualización.

Qué son las Perseidas

Las Perseidas también reciben el nombre de Lágrimas de San Lorenzo y son esos meteoritos que se friccionan contra la atmósfera terrestre. El fenómeno está asociado al cometa 109/P Swift-Tuttle que pasó por primera vez cerca de la Tierra en 1992.

Las partículas se desplazan a velocidades de 60 kilómetros por segundo, aproximadamente y se “apagan” a una altura de 80 kilómetros de la superficie. En realidad, estos materiales no se “prenden fuego”, sino que el aire a su alrededor se sobrecalienta, brilla, y por eso puede ser visto desde el suelo.

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