Por Gonzalo Cabrera Terrazas
30 Julio 2023
GOLAZO. Todos abrazan a Kociubinski, que recibió de pecho y le pegó de volea para abrir el marcador ante el “ferroviario”. gentileza foto de Guillermo Juarez
En un partido que se vio opacado por lo que sucedió fuera de la cancha, Atlético sacó a relucir su mejor versión en el complemento y venció de visitante a Central Córdoba 2-0 para cerrar su participación en la Liga Profesional con una imagen revitalizada.
Los tantos de la victoria “decana” fueron obra de Bautista Kociubinski y Cristian Menéndez, quien regresó al gol tras poco más de dos meses (no convertía desde la fecha 16 en la derrota con Argentinos 2-1).
Cuando la pelota volvió a rodar, tras el parate inicial, el “ferroviario” tuvo un tiro libre a favor y probó la capacidad de Tomás Marchiori. El “1” desvió con esfuerzo un potente cabezazo de Fabio Pereyra. El local siguió intentando llegar al área rival, pero tuvo muy poca precisión en ataque y, así, el peligro se esfumó por completo.
A los 22’, llegó la primera chance para el “decano”. Tras un buen pase de Mateo Coronel, Adrián Sánchez disparó desde larga distancia y Matías Mansilla contuvo sin problemas. Mientras que sobre el cierre de la primera mitad, Estigarribia se perdió lo que podría haber sido la apertura del marcador.
Tras un gran centro de Renzo Tesuri, que le ganó la espalda a Marcelo Benítez, el goleador le pegó mordido y la pelota terminó arriba del arquero, quien acusó un golpe.
Ya en el complemento, Favio Orsi y Sergio Gómez apostaron a los cambios y la jugada le salió perfecto. Los ingresos de Menéndez, Kociubinski y Ramiro Ruiz Rodríguez le dieron dinámica a su equipo; pero por sobre todas las cosas, gol.
A los 72’, “Kociu” mandó su remate por arriba de los tres palos; pero en la siguiente jugada estuvo más preciso y contundente. Tras un tiro libre ejecutado por Joaquín Pereyra -una de las figuras del partido- la defensa del “ferroviario” despejó mal y le quedó al ex Estudiantes, quien la paró de pecho y le pegó de volea para marcar el 1-0 y desatar la locura en la tribuna de los “neutrales”.
Unos minutos más tarde y cuando los hinchas santiagueños estallaban en furia, el “decano” asestó el golpe de gracia.
Matías Orihuela, tras una buena conexión con Ruiz Rodríguez, se metió al área y asistió a “Polaco”, quien no dudó y la mandó a guardar.
Atlético celebró su segunda victoria consecutiva y terminó el torneo con una sonrisa bien amplia. Desde que asumió la “dupla”, sumó 13 puntos sobre 15 posibles, se olvidó de la pelea por el descenso y comenzará la Copa de la Liga (en tres semanas) apuntando a las copas internacionales, el sueño de esos hinchas que ayer vibraron en el “Madre de Ciudades”.
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