La Pequeña Jazz Band celebra 45 años con el dixieland clásico

La Pequeña Jazz Band celebra 45 años con el dixieland clásico

La formación salteña se presenta esta noche en el teatro Rosita Ávila, para reivindicar una amistad que nació durante la adolescencia.

MADUREZ. La Pequeña Jazz Band se mantiene fiel a un estilo puro de dixieland, con un repertorio de standars. MADUREZ. La Pequeña Jazz Band se mantiene fiel a un estilo puro de dixieland, con un repertorio de standars.

Desde hace 45 años, La Pequeña Jazz Band (LPJB) recorre los escenarios de la región y del país desde su base en Salta para interpretar standars del género. La formación se basa en el dixieland como expresión de alegría, libertad y “un ánimo renovado en la esperanza de un futuro mejor”, anticipan sus integrantes en diálogo virtual con LA GACETA.

Ese espíritu se reflejará esta noche, desde las 21, en el teatro municipal Rosita Ávila (Las Piedras 1.550), cuando reproduzcan temas inolvidables como “St. Louis Blues”, “All of Me”, “When the Saints Go Marching In”, “Mack the Knife” y “St. James Infirmary”, entre otros, que marcaron distintas etapas de la música global. César Gamarra en trompeta, José Mario Alfarano en batería, Meir Levin en guitarra, Jorge Sastre en banjo, José Domingo Guzmán en piano, Nelson Montero en clarinete y saxo alto, Guillermo Gamarra en saxo tenor, Maximiliano Arce en bajo eléctrico y Francisco Gamarra en trombón tendrán a su cargo el recorrido sonoro, con una base clásica.

“Siempre hemos hecho lo posible por no fusionar géneros. Al inicio, en los 70, nuestros amigos y conocidos nos recomendaban dedicarnos a otro tipo de música; alegaban que el noroeste argentino es cuna de un folclore sumamente arraigado en las raíces culturales y veían al jazz como un género foráneo. Así es que lo que primero que cambió fue la concepción cultural sobre la música de los músicos. Apenas se formó LPJB comenzamos a tocar en los clubes de tango, alternando con las orquestas típicas y casi de inmediato comenzamos a dar conciertos didácticos por el interior de la provincia. Sorprendía sobremanera el hecho de que una banda de adolescentes tocaran música de generaciones pasadas. Luego surgieron viajes a diferentes provincias y en dos oportunidades pudimos llevar la propuesta hasta Brasil”, repasan los artistas.

- ¿Qué significa cumplir 45 años?

- Ha significado perseverar en la amistad verdadera, madurar en la producción artística, ver la vida desde un panorama más vasto y sobre todo valorar esta expresión como algo valioso no solo para el intérprete sino para todo el auditorio.

- ¿Qué los sedujo del jazz en sus adolescencias?

- Elegimos esta música porque es aún hoy, un grito de libertad, por la magnífica improvisación que permite expresar siempre de una manera nueva cada tema y por la proyección global que el jazz tiene. Siempre nos identificamos con el dixieland, una de las formas del jazz más difundidas a principios del siglo pasado.

- ¿Cuál es el motivo de que ese estilo siga gustando tanto?

- El motivo principal para que aún en nuestros días sea muy agradable al público en general es el ritmo y los sentimientos que transmite, que mezclan nostalgia y optimismo. La primera vez que tocamos en Brasil fuimos contratados por la cadena televisiva O Globo y la gente plegó todas las sillas y de repente se pusieron a bailar y batir palmas.

- ¿Hay una renovación generacional en el grupo, con la llegada de la siguiente generación de músicos?

- En la actualidad son nuestros hijos quienes suelen tocar con nosotros y ya están alcanzándonos la tercera generación de músicos, los nietos. Hoy estará sólo Francisco Gamarra entre los hijos, pero en otros recitales hay más herederos en escena.

- ¿Cuál es el estado del jazz en la región?

- En las últimas décadas ha crecido en forma exponencial ya que por la sólida formación musical de las nuevas generaciones es cada más posible y accesible. Este gran festejo de los 45 años nos saca de nuestra “zona de confort”, impulsándonos a trabajar unidos en un mismo objetivo, aportando cada uno su granito de arena desde el punto de vista artístico, musical, comercial y organizativo, en un contexto dominado por las redes sociales y la vorágine del ritmo de vida actual. Nuestro objetivo es no perder la esencia y valores del grupo, que nos han mantenido unidos todos estos años. Los ejes temáticos de la presentación de esta noche rotan alrededor de lo bueno, verdadero y bello de este vínculo que nos unió desde los orígenes de LPJB, por eso todos los temas que interpretaremos se refieren de alguna manera a esos tres principios inalienables.

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