30 Octubre 2007
DE LA CAJA AL INTERIOR. Osvaldo Jaldo será el responsable de fiscalizar el desempeño administrativo y financiero de las 93 comunas y de18 municipios. LA GACETA / FRANCO VERA
Con la creación de tres nuevas estructuras de fuerte implicancia política, el gobernador José Alperovich inició ayer su segundo período consecutivo al frente del Poder Ejecutivo.
Por la tarde, en un Salón Blanco desbordado por familiares y militantes, el mandatario provincial tomó el juramento de ley a los ocho ministros y a otros 76 funcionarios más, entre secretarios de Estado, subsecretarios y responsables de organismos autárquicos.
Si bien no hay grandes cambios entre los nombres de quienes conducirán las principales estructuras, con respecto a los que culminaron su gestión ayer, sí sobresale la jerarquización de dos áreas sensibles: el Ministerio del Interior, responsable de fiscalizar el manejo financiero y administrativo de 18 municipios y 93 comunas rurales (lo manejará Osvaldo Jaldo); y de Desarrollo Social, cuya función comprende la atención social de familias necesitadas y la rápida acción frente a situaciones de emergencia, a cargo de Beatriz Mirkin.
Paralelamente, Alperovich creó el Ente Regulador de Infraestructura Comunitaria, que administrará Rolando Alfaro. Este órgano tendrá la responsabilidad de diseñar y de ejecutar obras públicas en el Gran San Miguel de Tucumán, con total autonomía respecto de las otras áreas de Gobierno y bajo la supervisión directa del mandatario. Incluso, este nuevo ente funcionará con presupuesto propio y con una dotación que supera, en una primera etapa, al centenar de trabajadores y obreros.
"Vamos a apoyar a cada delegado comunal, a los intendentes y a los concejales. La idea del gobernador, al crear el Ministerio del Interior, es tener un mayor control y fiscalización, con el objetivo de hacer más eficiente el gasto en cada comuna y municipio", explicó Jaldo a fin de justificar la jerarquización de la secretaría que conducía el hoy legislador, Sergio Mansilla.
El funcionario aclaró que no forma parte de la agenda oficial la municipalización de algunas grandes comunas, a pesar de que en su área funcionará una secretaría específica. "No hay dudas que algunas comunidades crecieron mucho; por eso estamos haciendo una pequeña diferencia al crear un área para atenderlas, hasta que el gobernador tome una decisión política e institucional", sostuvo.
Alfaro, en tanto, aseguró que la creación de un ente responsable de ejecutar obras de infraestructura básica no choca con otras estructuras de Gobierno, ni tampoco con la tarea que efectúan los intendentes. "Lo primero que me pidió el gobernador es que nos hagamos cargo de recuperar comisarías, CAPS, escuelas y jardines. Tengo amplias facultades, porque dependo directamente del gobernador. Si la Municipalidad de la capital quiere que le demos una mano, se la daremos", señaló.
El legislador (en uso de licencia) adelantó que administrará un generoso presupuesto, con el que comprará maquinaria vial y elementos de trabajo. "Vamos a designar al personal nosotros. El objetivo es resolver problemas de manera inmediata, porque muchas veces la burocracia que tienen otras reparticiones impide que se desarrollen rápidamente las obras. Vamos a imprimir celeridad", dijo.
Finalmente, Mirkin expresó que, al convertirse en ministerio, el área de Políticas Sociales se fortalecerá. "Esto tiende a producir un nuevo modo de gestionar la atención, porque uno de nuestros problemas era cómo territorializar las acciones. No sólo para dar soluciones individuales sino también para facilitar el desarrollo local", afirmó.
Por la tarde, en un Salón Blanco desbordado por familiares y militantes, el mandatario provincial tomó el juramento de ley a los ocho ministros y a otros 76 funcionarios más, entre secretarios de Estado, subsecretarios y responsables de organismos autárquicos.
Si bien no hay grandes cambios entre los nombres de quienes conducirán las principales estructuras, con respecto a los que culminaron su gestión ayer, sí sobresale la jerarquización de dos áreas sensibles: el Ministerio del Interior, responsable de fiscalizar el manejo financiero y administrativo de 18 municipios y 93 comunas rurales (lo manejará Osvaldo Jaldo); y de Desarrollo Social, cuya función comprende la atención social de familias necesitadas y la rápida acción frente a situaciones de emergencia, a cargo de Beatriz Mirkin.
Paralelamente, Alperovich creó el Ente Regulador de Infraestructura Comunitaria, que administrará Rolando Alfaro. Este órgano tendrá la responsabilidad de diseñar y de ejecutar obras públicas en el Gran San Miguel de Tucumán, con total autonomía respecto de las otras áreas de Gobierno y bajo la supervisión directa del mandatario. Incluso, este nuevo ente funcionará con presupuesto propio y con una dotación que supera, en una primera etapa, al centenar de trabajadores y obreros.
"Vamos a apoyar a cada delegado comunal, a los intendentes y a los concejales. La idea del gobernador, al crear el Ministerio del Interior, es tener un mayor control y fiscalización, con el objetivo de hacer más eficiente el gasto en cada comuna y municipio", explicó Jaldo a fin de justificar la jerarquización de la secretaría que conducía el hoy legislador, Sergio Mansilla.
El funcionario aclaró que no forma parte de la agenda oficial la municipalización de algunas grandes comunas, a pesar de que en su área funcionará una secretaría específica. "No hay dudas que algunas comunidades crecieron mucho; por eso estamos haciendo una pequeña diferencia al crear un área para atenderlas, hasta que el gobernador tome una decisión política e institucional", sostuvo.
Alfaro, en tanto, aseguró que la creación de un ente responsable de ejecutar obras de infraestructura básica no choca con otras estructuras de Gobierno, ni tampoco con la tarea que efectúan los intendentes. "Lo primero que me pidió el gobernador es que nos hagamos cargo de recuperar comisarías, CAPS, escuelas y jardines. Tengo amplias facultades, porque dependo directamente del gobernador. Si la Municipalidad de la capital quiere que le demos una mano, se la daremos", señaló.
El legislador (en uso de licencia) adelantó que administrará un generoso presupuesto, con el que comprará maquinaria vial y elementos de trabajo. "Vamos a designar al personal nosotros. El objetivo es resolver problemas de manera inmediata, porque muchas veces la burocracia que tienen otras reparticiones impide que se desarrollen rápidamente las obras. Vamos a imprimir celeridad", dijo.
Finalmente, Mirkin expresó que, al convertirse en ministerio, el área de Políticas Sociales se fortalecerá. "Esto tiende a producir un nuevo modo de gestionar la atención, porque uno de nuestros problemas era cómo territorializar las acciones. No sólo para dar soluciones individuales sino también para facilitar el desarrollo local", afirmó.