24 Octubre 2007
Un arquitecto tucumano proyectó el edificio más alto del mundo
La torre mediría 1.000 metros y estaría en Libia. Los fuertes vientos provenientes del desierto obligarán a resolver problemas estructurales. Está previsto que en el lugar funcione un lujoso hotel con locales comerciales y de entretenimiento. En estudio.
JUNTO A LA INMENSIDAD DEL OCEANO. Este edificio estará acariciando el mar. FOTO GENTILEZA MAXIMO COSSIO ETCHECOPAR
El arquitecto tucumano Máximo Cossio Etchecopar proyectó el edificio más alto del mundo, que estaría en Libia y se llamaría "Los ojos del cielo". Con sus 1.000 metros, el rascacielos mediría el doble que la torre de Taipei 101, en Taiwán, que actualmente es la estructura más elevada. En el lugar funcionaría un lujoso hotel, que incluiría galerías comerciales y locales de entretenimiento.
El proyecto fue requerido por el Gobierno libio a Etchecopar, y actualmente está siendo evaluado por las autoridades de ese país. Si prospera, el urbanista podría comenzar a materializar sus bocetos a partir del año que viene. "La torre se yergue como un hito escultórico de proporciones monumentales y tiene una ancha base, que se hace esbelta conforme gana en altura", explicó el arquitecto.
La construcción estaría rodeada por una plaza que albergaría árboles representativos de muchas regiones de la Tierra. También habría especies en peligro de extinción, para lo cual se han ideado criaderos especiales. "Este proyecto nos obligaría a resolver problemas estructurales, debido a los fuertes vientos que provienen del desierto", advirtió el experto.
El aspecto ambiental también sería fundamental, ya que no sólo se tendría que proveer de confortabilidad al interior en un país de tórridas temperaturas, sino que también habría que racionar el uso del agua. LA GACETA ©
El proyecto fue requerido por el Gobierno libio a Etchecopar, y actualmente está siendo evaluado por las autoridades de ese país. Si prospera, el urbanista podría comenzar a materializar sus bocetos a partir del año que viene. "La torre se yergue como un hito escultórico de proporciones monumentales y tiene una ancha base, que se hace esbelta conforme gana en altura", explicó el arquitecto.
La construcción estaría rodeada por una plaza que albergaría árboles representativos de muchas regiones de la Tierra. También habría especies en peligro de extinción, para lo cual se han ideado criaderos especiales. "Este proyecto nos obligaría a resolver problemas estructurales, debido a los fuertes vientos que provienen del desierto", advirtió el experto.
El aspecto ambiental también sería fundamental, ya que no sólo se tendría que proveer de confortabilidad al interior en un país de tórridas temperaturas, sino que también habría que racionar el uso del agua. LA GACETA ©
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