Lo de River fue un estrepitoso fracaso

CUCUTA, Colombia/BUENOS AIRES.- Caracas, con varios suplentes, dejó afuera de la Copa a River al batirlo por 3 a 1 y pasó de ronda junto a Colo Colo. Ya en Buenos Aires lo había vencido por 1 a 0. "La revolea Gerlo de una manera tan desprolija que la pelota cayó llorando", pintó un relator radial. Y eso fue, en general, la escuadra "millonaria". Como dice el hincha tribunero: una lágrima.
Fue la tercera vez que con Daniel Passarella como entrenador, River queda afuera en la primera fase. Habrá que ver cómo repercute esta eliminación en un equipo cuyos hinchas tenían enormes esperanzas, en un club que gastó millones de dólares para reforzar su plantel. Pero el fútbol es así. No se murió nadie. Esto es un juego al que muchos quieren convertir, por diversos intereses, en otra cosa.
El golazo de Rey en el inicio, con una volea desde 25 metros, no presagió nada bueno para River. Farías empató transitoriamente cuando su equipo estaba obnubilado en la cancha. Pero Caracas tuvo la fibra que le faltó a River y metió dos estocadas, aprovechando groseros errores del rival y con Escobar muy inspirado.
En el complemento, River tuvo la pelota. Atacó siempre, pero torpemente, sin ideas. Sólo una llegada de Ruben que tapó Toyo resultó lo más claro de River. Caracas controló en defensa casi sin apremios. Además, Larrionda le perdonó la roja Ponzio y a Rivas. Caracas fue pícaro y práctico. River, sólo impotencia.

Ortega faltó al entrenamiento y generó múltiples conjeturas
El controvertido delantero Ariel Ortega volvió a las andadas, al ausentarse sin aviso de la práctica que River llevó a cabo ayer en Ezeiza.
Múltiples conjeturas se tejieron en torno de este nuevo faltazo del jujeño, aunque oficialmente se informó que obedeció a un problema familiar.
Ortega no se presentó a la práctica que por la mañana condujo Guillermo Rivarola.
La ausencia del "Burrito" rápidamente fue advertida por la prensa acreditada, por lo que el cuerpo técnico intentó localizarlo de inmediato.
Varias llamados telefónicos debieron realizar Rivarola y el preparador físico Gustavo Soto antes de que Ortega diera señales de vida. "Tengo un problema con uno de mis hijos", habría sido la escueta explicación del jugador que se recupera de una adicción al alcohol, que lo tuvo momentáneamente al margen de la actividad.
Sin embargo, fuentes allegadas a la comisión directiva de la entidad de Núñez indicaron que temen que el futbolista haya sufrido algún tipo de recaída en las últimas horas.
En ese sentido, revelaron que Ortega se habría molestado con el entrenador Daniel Passarella al conocer que no viajaría junto al plantel que enfrentó anoche a Caracas por el Grupo 6 de la Copa Libertadores.
El entrenador decidió dejarlo en Buenos Aires con el objetivo de preservarlo físicamente de un viaje muy agotador, como es el tener que trasladarse hasta la localidad colombiana de Cúcuta, donde Caracas hizo las veces de local por una suspensión que le impuso a su estadio la CSF.
Además, la idea original del "Kaiser" era incluirlo en el equipo titular que el domingo enfrentará a Belgrano, por la novena fecha del certamen Clausura.
Ahora, con este nuevo acto de inconducta, sus posibilidades de jugar se han diluido bastante, aunque habrá que esperar el regreso de River de su gira por Colombia para ver qué decisión asume Passarella en torno a esta nueva situación.(Especial-NA)