26 Enero 2004
CIFRAS EN LA PIEDRA. La observación minuciosa del dibujo de una “yupana” llevó a descifrar el método matemático de los incas.
ROMA.- Nicolino de Pasquale, un profesor italiano de ingeniería, ha descubierto cómo funcionaba el sistema de cálculo de los incas, un misterio que ha quitado el sueño a generaciones de científicos.
Desde el descubrimiento de América hace más de 500 años, estudiosos de todo el mundo trataron de resolver sin éxito lo que hasta ahora era un gran misterio: cómo se calculaba durante el Imperio Inca. Todo comenzó tras el hallazgo de las yupanas, las calculadoras incas, unas tablillas de barro o piedra de 30 por 20 centímetros, formadas por cuadrantes o casillas, donde se colocaban piedrecillas o granos de maíz y que servían como ábaco a los incas.
Durante siglos, los científicos intentaron estudiar este complicado sistema matemático, y acuñaron varias teorías pero ninguna certeza. Hasta que a De Pasquale -un hombre de 54 años apasionado por las matemáticas que no sabía nada sobre los incas- alguien le regaló un libro sobre enigmas matemáticos en el que se encontraba el diseño de una yupana.
Durante las vacaciones de Navidad de 2000 De Pasquale se puso a estudiar el complicado jeroglífico inca y en sólo unos meses resolvió el enigma. La importante noticia se comunicó en Florencia, en el marco de la muestra "Perú, 3.000 años de obras maestras", donde De Pasquale explicó su teoría con varios ejemplos.
Según él, la fórmula de los incas no estaría basada en nuestro sistema decimal, como se creía hasta ahora, sino en un sistema basado en el número 40. Los incas habrían contado a través de la yupana de derecha a izquierda y partiendo desde la última casilla, que contaría las unidades.
Como las computadoras
Después, la casilla de la fila superior valdría 40 y la siguiente 80 y así hasta el infinito, pudiéndose calcular cifras enormes.
En otras palabras, se trataría de una progresión geométrica que reproduce curiosamente el sistema en el que se basan los procesadores de las computadoras. Además, el complejo cálculo matemático habría revelado que para los incas no existía la cifra 0 y que un mismo número se podía representar de varias maneras.
En la muestra, además de algunos ejemplos de yupanas, se pueden observar los quipus -que en la lengua quechua quiere decir nudo- formados por cuerdas donde se hacían nudos y que servían para reflejar los resultados de las operaciones matemáticas realizadas en las increíbles calculadoras incas. (Especial)
Desde el descubrimiento de América hace más de 500 años, estudiosos de todo el mundo trataron de resolver sin éxito lo que hasta ahora era un gran misterio: cómo se calculaba durante el Imperio Inca. Todo comenzó tras el hallazgo de las yupanas, las calculadoras incas, unas tablillas de barro o piedra de 30 por 20 centímetros, formadas por cuadrantes o casillas, donde se colocaban piedrecillas o granos de maíz y que servían como ábaco a los incas.
Durante siglos, los científicos intentaron estudiar este complicado sistema matemático, y acuñaron varias teorías pero ninguna certeza. Hasta que a De Pasquale -un hombre de 54 años apasionado por las matemáticas que no sabía nada sobre los incas- alguien le regaló un libro sobre enigmas matemáticos en el que se encontraba el diseño de una yupana.
Durante las vacaciones de Navidad de 2000 De Pasquale se puso a estudiar el complicado jeroglífico inca y en sólo unos meses resolvió el enigma. La importante noticia se comunicó en Florencia, en el marco de la muestra "Perú, 3.000 años de obras maestras", donde De Pasquale explicó su teoría con varios ejemplos.
Según él, la fórmula de los incas no estaría basada en nuestro sistema decimal, como se creía hasta ahora, sino en un sistema basado en el número 40. Los incas habrían contado a través de la yupana de derecha a izquierda y partiendo desde la última casilla, que contaría las unidades.
Como las computadoras
Después, la casilla de la fila superior valdría 40 y la siguiente 80 y así hasta el infinito, pudiéndose calcular cifras enormes.
En otras palabras, se trataría de una progresión geométrica que reproduce curiosamente el sistema en el que se basan los procesadores de las computadoras. Además, el complejo cálculo matemático habría revelado que para los incas no existía la cifra 0 y que un mismo número se podía representar de varias maneras.
En la muestra, además de algunos ejemplos de yupanas, se pueden observar los quipus -que en la lengua quechua quiere decir nudo- formados por cuerdas donde se hacían nudos y que servían para reflejar los resultados de las operaciones matemáticas realizadas en las increíbles calculadoras incas. (Especial)