08 Octubre 2007
MENSAJE. “El demonio es el que nos engaña; nos promete y no nos paga”, advirtió monseñor Bergoglio. NA
Buenos Aires.- En medio de un clima de tensión entre la Iglesia y el Gobierno, el arzobispo de Buenos Aires, cardenal Jorge Bergoglio, condenó a los que “engañan”, en el cierre de la peregrinación a Luján, y les advirtió que “no quieran venderles un buzón” a los fieles.
“El mentiroso por esencia es el que nos muestra vidrios de colores y nos hace creer que son joyas preciosas”, alertó Bergoglio durante la homilía que cerró la 33 peregrinación juvenil a Luján, y en la que utilizó analogías que parecieron apuntar al Gobierno nacional.
La procesión, que en está ocasión se realizó bajo el lema “María ayúdame a vivir en la verdad”, fue más numerosa que en años anteriores y contó con la presencia de devotos que arribaron a Luján de a pie desde diversos puntos de la provincia.
“Todos sabemos que hay alguien que no quiere la verdad”, señaló Bergoglio, que apeló a una parábola bíblica para completar la idea: “Jesús le puso un nombre a quien se aparece en el desierto y nos dibuja escenarios de mentira, ese es el demonio”.
Ante centenares de miles de fieles que llenaron la plaza Belgrano, frente a la Basílica, la máxima autoridad de la Iglesia, insistió en que “el demonio es el que nos engaña; nos promete y no nos paga, porque como es mentiroso es un mal pagador. Es el padre de la mentira”. El cardenal mantiene una relación tirante con el gobierno del presidente Néstor Kirchner y, fracasados todos los intentos de acercamiento a la Casa Rosada, es considerado por el oficialismo como uno de los más enconados opositores.
Durante la homilía, Bergoglio solicitó a los presentes que repitieran tres veces en voz alta el lema de la procesión, y subrayó: “las raíces del pueblo argentino, nuestra historia y pertenencia, están en la casa de Jesús”. “Muchas cosas pueden ir cambiando pero la raíz de la verdad está acá, recordemos nuestra pertenencia cristiana”, manifestó, al tiempo que exhortó al público a mirar a la Virgen y vivir en la verdad.
La misa que presidió Bergoglio comenzó a las 7 y duró sólo 15 minutos. La jornada trascurrió en un agradable clima primaveral. Se pudo observar una gran cantidad de pancartas y pasacalles con consignas contra el aborto, a cargo de grupos religiosos conservadores. (NA)
“El mentiroso por esencia es el que nos muestra vidrios de colores y nos hace creer que son joyas preciosas”, alertó Bergoglio durante la homilía que cerró la 33 peregrinación juvenil a Luján, y en la que utilizó analogías que parecieron apuntar al Gobierno nacional.
La procesión, que en está ocasión se realizó bajo el lema “María ayúdame a vivir en la verdad”, fue más numerosa que en años anteriores y contó con la presencia de devotos que arribaron a Luján de a pie desde diversos puntos de la provincia.
“Todos sabemos que hay alguien que no quiere la verdad”, señaló Bergoglio, que apeló a una parábola bíblica para completar la idea: “Jesús le puso un nombre a quien se aparece en el desierto y nos dibuja escenarios de mentira, ese es el demonio”.
Ante centenares de miles de fieles que llenaron la plaza Belgrano, frente a la Basílica, la máxima autoridad de la Iglesia, insistió en que “el demonio es el que nos engaña; nos promete y no nos paga, porque como es mentiroso es un mal pagador. Es el padre de la mentira”. El cardenal mantiene una relación tirante con el gobierno del presidente Néstor Kirchner y, fracasados todos los intentos de acercamiento a la Casa Rosada, es considerado por el oficialismo como uno de los más enconados opositores.
Durante la homilía, Bergoglio solicitó a los presentes que repitieran tres veces en voz alta el lema de la procesión, y subrayó: “las raíces del pueblo argentino, nuestra historia y pertenencia, están en la casa de Jesús”. “Muchas cosas pueden ir cambiando pero la raíz de la verdad está acá, recordemos nuestra pertenencia cristiana”, manifestó, al tiempo que exhortó al público a mirar a la Virgen y vivir en la verdad.
La misa que presidió Bergoglio comenzó a las 7 y duró sólo 15 minutos. La jornada trascurrió en un agradable clima primaveral. Se pudo observar una gran cantidad de pancartas y pasacalles con consignas contra el aborto, a cargo de grupos religiosos conservadores. (NA)
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