03 Octubre 2005
CONCEPCION.- La Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), a través de la Fundación Balseiro, determinó que el depósito de material fino descubierto en inmediaciones del dique de Villa Lola, en Alpachiri, contiene elementos químicos de origen minero de alta peligrosidad.
Eso afirmaron dirigentes de la Federación de Organizaciones Ambientalistas No Gubernamentales de Tucumán tras recibir un informe de la CNEA sobre estudios en muestras de suelo tomadas en el lugar, próximo al mineralducto de Bajo La Alumbrera. Los resultados del estudio se difundieron durante una conferencia de prensa, de la que participaron la senadora nacional Delia Pinchetti de Sierra Morales y dirigentes de organizaciones ambientalistas locales.
Se tiene casi la certeza, dijeron, de que los elementos habrían aparecido tras una rotura de la cañería. "La muestra contiene, por lo menos cobre, plata, arsénico, vanadio, cromo, plomo, níquel, mercurio, selenio, molibdeno, oro, cadmio, aluminio, silicio, calcio, magnesio, titanio y manganeso", dijeron los ingenieros Pedro Santiago Otonello y Juan Prado Iratchet, dirigentes de la Federación Ambiental.
"Comparando los estudios con los límites tolerables por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el agua potable, el lavado con ácido determina una presencia importante de vanadio, cromo, plomo y níquel", dijeron.
Explicaron además que el lavado con agua establece valores muy críticos para el cromo y el plomo. A través del mismo procedimiento se determinó que la presencia de vanadio, níquel, mercurio y selenio supera los límites tolerables impuestos por la OMS. El análisis del material lavado con agua se pidió para estimar si esos materiales pueden, con la lluvia, llegar a cursos de agua cercanos, superficiales o subterráneos.
La Federación Ambiental exhortó al Gobierno provincial a que retire la totalidad del suelo detectado en terrenos aledaños al dique de Villa Lola y a que realice una investigación para determinar la responsabilidad que le cabe a la minera. También se pidió una pesquisa para establecer si hay otros depósitos de desechos como, según dicen vecinos de la zona, los que existirían en áreas cercanas al mineralducto.
Daños a la salud
Los ambientalistas explicaron que la presencia de vanadio en líquido de consumo humano puede ocasionar daños cardíacos, vasculares y del sistema nervioso, inflamación del estómago e intestinos, sangrado del hígado y riñones, entre otros efectos. El consumo de cromo puede dañar riñones e hígado, producir alteraciones genéticas y cáncer de pulmón. El plomo, a su vez, ocasiona daños al cerebro; disminución de la fertilidad del hombre; daño a los riñones y perturbaciones en el comportamiento de los niños. (C)
Eso afirmaron dirigentes de la Federación de Organizaciones Ambientalistas No Gubernamentales de Tucumán tras recibir un informe de la CNEA sobre estudios en muestras de suelo tomadas en el lugar, próximo al mineralducto de Bajo La Alumbrera. Los resultados del estudio se difundieron durante una conferencia de prensa, de la que participaron la senadora nacional Delia Pinchetti de Sierra Morales y dirigentes de organizaciones ambientalistas locales.
Se tiene casi la certeza, dijeron, de que los elementos habrían aparecido tras una rotura de la cañería. "La muestra contiene, por lo menos cobre, plata, arsénico, vanadio, cromo, plomo, níquel, mercurio, selenio, molibdeno, oro, cadmio, aluminio, silicio, calcio, magnesio, titanio y manganeso", dijeron los ingenieros Pedro Santiago Otonello y Juan Prado Iratchet, dirigentes de la Federación Ambiental.
"Comparando los estudios con los límites tolerables por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para el agua potable, el lavado con ácido determina una presencia importante de vanadio, cromo, plomo y níquel", dijeron.
Explicaron además que el lavado con agua establece valores muy críticos para el cromo y el plomo. A través del mismo procedimiento se determinó que la presencia de vanadio, níquel, mercurio y selenio supera los límites tolerables impuestos por la OMS. El análisis del material lavado con agua se pidió para estimar si esos materiales pueden, con la lluvia, llegar a cursos de agua cercanos, superficiales o subterráneos.
La Federación Ambiental exhortó al Gobierno provincial a que retire la totalidad del suelo detectado en terrenos aledaños al dique de Villa Lola y a que realice una investigación para determinar la responsabilidad que le cabe a la minera. También se pidió una pesquisa para establecer si hay otros depósitos de desechos como, según dicen vecinos de la zona, los que existirían en áreas cercanas al mineralducto.
Daños a la salud
Los ambientalistas explicaron que la presencia de vanadio en líquido de consumo humano puede ocasionar daños cardíacos, vasculares y del sistema nervioso, inflamación del estómago e intestinos, sangrado del hígado y riñones, entre otros efectos. El consumo de cromo puede dañar riñones e hígado, producir alteraciones genéticas y cáncer de pulmón. El plomo, a su vez, ocasiona daños al cerebro; disminución de la fertilidad del hombre; daño a los riñones y perturbaciones en el comportamiento de los niños. (C)
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