En el país era cuestión de tiempo para la llegada de este tipo de tecnología en el área de seguridad. El Sistema de Reconocimiento Facial permitirá detectar a personas prófugas, desaparecidas o para resolver un crimen. Los individuos que pasen frente a cámaras estratégicamente colocadas en lugares públicos, como ser las estaciones de trenes, subtes, ómnibus, y hasta en las mismas calles, podrán ser detectadas.
Sin que el individuo sea consciente, y usando un algoritmo, se compararán sus rasgos con los de las personas fichadas en la base de datos. Si bien no es 100% preciso, permitirá una mayor eficacia a lo hora de identificar a la persona buscada.
El proyecto comenzó a tomar forma en 2017 con la intervención del doctor en informática Pablo Negri, investigador adjunto del Conicet, quien desarrolló el Siface, un sistema de reconocimiento facial que el mismo día que se probó tuvo éxito: en agosto se logró identificar a una mujer de 29 años a quien su familia buscaba desde abril y que estaba internada en el Hospital Argerich. Ella no recordaba su identidad y su registro dactilar era deficiente.
El Siface tomó la foto cargada en el Sistema Federal de Búsqueda de Personas Desaparecidas y Extraviadas (Sifebu) -que había sido enviada por el Argerich- y la comparó con la base de datos del Renaper y las comunicaciones policiales del Sifcop.
El proyecto de reconocimiento facial apunta a que el sistema funcione tanto en los subterráneos de la capital del país como en las terminales de trenes supeditadas a nivel federal. La prueba piloto tiene fecha puesta para marzo, en lugares muy concurridos como el Obelisco donde confluyen las líneas C, B y D, según informó el diario Clarín.
"La idea es usar cámaras fijas de buena resolución que capten el paso de las personas por los molinetes de las estaciones ferroviarias. Se trata de un sistema de cotejo automático mucho más eficiente que tener a un operador mirando imágenes", explicó Jorge Teodoro, director nacional de Tecnología del Ministerio que comanda Patricia Bullrich.
Es momento de ponernos a la altura de las actuales situaciones que se viven día a día. Los casinos emplean esta tecnología para impedir la entrada de adictos al juego. Los hoteles, para identificar a huéspedes que deben ser tratados con especial consideración y viajan de incógnito. Incluso serviría para encontrar a personas que desaparecen “de la faz de la tierra” y en realidad viven a la vuelta de la esquina encubiertos.
Actualmente existe un sistema centralizado de notificaciones policiales llamado Sifcop. Allí se concentran todos los pedidos de captura, los paraderos y los impedimentos de salida del país librados por la Justicia.
Al 15 de enero -cuando Clarín hizo la consulta- en el sistema había 19.696 solicitudes de la Justicia para buscar personas extraviadas, 25.339 pedidos de captura y detención, y 23.652 solicitudes de paradero.
Lo que se necesitaba era la creación de un método que identificara a las personas buscadas con rus rasgos faciales y eso es lo que se logró.