Los puntos oscuros de la causa por el crimen de Facundo Ferreira

Facundo Ferreira tenía 12 años cuando, en la madrugada del 8 de marzo, murió con un tiro en la nuca en la esquina de avenida Avellaneda y pasaje Río de Janeiro. Por su crimen los policías Nicolás Montes de Oca y Mauro Cáceres Díaz están siendo investigados ya que desde la fiscalía sospechan que se trató de un caso de gatillo fácil.

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La fiscala, Adriana Giannoni, por más que haya definido de alguna manera la situación de los uniformados involucrados en la muerte del menor, aún quiere esclarecer algunos puntos oscuros que aparecen en la causa y por los que se sospecha que la Policía podría haber realizado algunas maniobras para encubrir el crimen.

Uno de los puntos con los que más se sostiene esta hipótesis es el tiempo que se demoró la Policía para avisar que se había producido ese hecho: una hora y media.

Cuando llegaron los colaboradores de la fiscala, se dieron cuenta que los hombres del servicio 911 -compañeros de labor de los procesados- y de la jurisdicción habían intervenido en el caso recolectando pruebas y cerrando el área. La división Homicidios, que normalmente actúa en este tipo de casos, no tuvo intervención.

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Todo esto sembró dudas ya que los investigadores aseguraron que en el lugar del crimen habían encontrado el arma que habrían utilizado los menores. Al analizarla, descubrieron que no tenía grabadas huellas dactilares de los jóvenes.

 Los siete puntos oscuros de la causa

- No está confirmado que la pistola calibre 22 haya sido utilizada por Facundo o si fue plantada en el lugar del hecho.

- Hasta el momento no hay ningún indicio de que el menor de 12 años haya disparado el arma contra los policías.

- No se conocen los motivos por los que se inició la persecución policial.

- La Policía tardó más de una hora y media para informar el hecho a los responsables de la fiscalía VIII lo que había sucedido.

- El personal del servicio 911, compañeros de los policías involucrados en la muerte de Facundo, fueron los primeros en llegar al hecho.

- Cuando los miembros de la fiscalía llegaron a la escena, descubrieron que la policía había realizado las primeras pericias sin control por parte de algunos de ellos.

- Los policías llevaron al hospital de Niños al menor. Allí explicaron que había sufrido un accidente de moto y no que había recibido un balazo en la nuca.