Una noche dedicada a la música colombiana

ACTÚA HOY

• A las 22 en el Centro Cultural Virla (25 de Mayo 265).

A los 77 años, Totó la Momposina sigue llevando por todos los escenarios de su Colombia natal los cantos del Caribe, atravesados por sonidos de los pueblos originarios y los tambores de los esclavos africanos que habitaron su tierra. De esas mezclas surgieron la cumbia, el porro, la chalupa y el mapalé, que esta noche sonarán en el Centro Cultural Virla en un tributo que Son Del Mate le rendirá a la histórica Sonia Bazanta Vides (tal es su nombre original), transformada en un símbolo de la música tradicional folclórica latinoamericana.

La formación es un grupo de músicos y bailarines de Tucumán, Santiago del Estero, Salta y Uruguay que desde hace cuatro años se dedica a los ritmos del continente. Sus integrantes son Florencia Lobo, Natalia Gómez Salas, Joaquín Villalba, Damián Osorio Barreto, Martín Zelaya, Matías Orquera, Marcos Suca, Antonella Correa, Brenda Mdlell, Gianina Quintana Hernández y María Chara. Para este recital se sumarán como invitados especiales Angélica Camuñas, Alina Farah, Lourdes Villalba, Javier Seco, Martín Salazar, Felipe Villalba, Camilo López y Mateo López.

“Este homenaje lo realizamos a partir de nuestra investigación por la música colombiana, por el respeto y la admiración que nos genera esta artista. Totó es una gran creadora que supo realizar un mestizaje de los elementos sonoros africanos, indígenas y blancos. Ella es la cuarta generación de una familia dedicada a la música, con padre percusionista y madre cantante y bailarina. Comenzó profesionalmente en 1964 con sus padres y hermanos y en 1982 acompañó a Gabriel García Márquez a recibir el Premio Nobel de Literatura en Suecia”, reseña Osorio Barreto.

La artista estuvo en Córdoba este año, oportunidad en la que algunos integrantes de Son Del Mate la conocieron y aprendieron sobre su estética para presentar un espectáculo. “En especial a partir del aporte que los sonidos africanos realizaron a los ritmos latinoamericanos, lo cual es palpable en las similitudes que podemos encontrar en los ritmos de cada continente -explica Osorio Barreto-. Una de nuestras iniciativas es también investigar cuál fue el aporte de la los pueblos originarios, y descubrimos que en la gran mayoría de los países se encuentra este mestizaje”.

“Nuestro propósito es que el público llegue a comprender el mensaje de emancipación de los pueblos de nuestra región, tal como lo venimos sosteniendo durante los últimos años -añade-. Para ello debemos conocer sus orígenes y sus culturas. Por eso llevamos nuestras intervenciones a plazas, escenarios callejeros y no convencionales. Esta vez llegamos al Virla; lograr que el espectador vaya a un teatro también es importante, por eso pusimos un precio accesible a las entradas. El pueblo debe volver a ganar estos espacios que surgieron como lugares abiertos”.