BUENOS AIRES.- La desesperación matizada por la esperanza, y viceversa, fueron la constante durante toda la jornada de ayer, la sexta en que no se tienen noticias del submarino ARA San Juan ni de sus 44 tripulantes.
Cerca de la medianoche, Clarín.com dio cuenta de que se habría detectado una señal a partir de la cual se estableció un nuevo perímetro de búsqueda en el Atlántico Sur. Según esta especie, una flota encabezada por la corbeta Drummond se dirigía al lugar en los primeros minutos de hoy para tratar de verificar si esa señal corresponde al sumergible argentino, con el cual se perdió todo tipo comunicación desde el pasado miércoles 15.
Antes, Radio Mitre había dado cuenta de trascendidos según los cuales la Marina de los Estados Unidos habría localizado con uno de sus aviones una “mancha calórica”, que se correspondería a un objeto metálico, a unos 300 kilómetros de la costa de Puerto Madryn y a unos 70 metros de profundidad.
Ninguna de estas versiones, sin embargo, había podido ser confirmada con fuentes oficiales, según aclararon ambos medios.
Esa expectativa fue el contraste con la angustia que signó los mensajes de los responsables de la búsqueda durante la jornada. Anoche, el vocero de la Armada, Enrique Balbi, había reconocido que las tareas han ingresado en una etapa crítica, principalmente por las dificultades de oxígeno para los 44 tripulantes del navío.
“No hay novedades en los barridos y los patrullajes marítimos. Las esperanzas no las perdemos nunca, pero la incertidumbre va creciendo y, de a poco, entramos en una etapa critica”, había reconocido.
Unas 4.000 personas colaboran en la búsqueda, tanto de fuerzas nacionales como internacionales. “Hay 14 unidades de superficie y 10 aeronaves”, había detallado Balbi..
Dos tucumanos a bordo
Dentro de la tripulación del submarino, que desapareció cubriendo el tramo entre Ushuaia y Mar del Plata, a la altura de la Península de Valdez, viajaban dos tucumanos: el capitán Pedro Martín Fernández y el cabo principal Luis Esteban García.
Nacido en Tucumán hace 45 años, Fernández pasó su niñez en el barrio Echeverría, cursó sus estudios secundarios en la escuela Normal y luego continuó su formación militar hasta alcanzar el grado de capitán de fragata. Fernández vive desde hace casi una década junto a su familia en Mar del Plata. Es padre de tres hijos adolescentes. Es la máxima autoridad dentro del ARA San Juan.
García también forma parte de los 44 tripulantes del sumergible. Vive en Mar del Plata junto a su esposa, Gabriela Acosta, y sus dos hijos: Nahuel, de 1 año; y Agustín, de 3. El marino, hincha de San Martín, había publicado en las redes sociales una foto en la Bahía de Ushuaia.
Más equipamiento
Para hoy se espera que el buque noruego Skandi Patagonia, contratado por la marina estadounidense y que cuenta con elementos de última generación, llegue al área de búsqueda, ya que partió ayer del puerto de Comodoro Rivadavia.
El navío lleva un sonar de búsqueda lateral, una campana de salvamento que puede sumergirse hasta los 250 metros en profundidad y un vehículo que opera en forma remota desde la superficie, para inspeccionar el fondo, con posibilidades de trabajar hasta los 1.200 metros. (Télam, DyN, Clarín.com)