22 Noviembre 2017
EN PLENO CAMINO. Cuatro desconocidos atacaron y se llevaron una de las bicicletas de competición.
Cuatro hombres emboscaron y atacaron ayer a un grupo de bikers por un camino alternativo de Yerba Buena. En el ataque, según denunciaron las víctimas, sustrajeron una de las bicicletas de competición y otras pertenencias a algunos de los deportistas.
Como cada siesta, siete amigos se reunieron para realizar un nuevo entrenamiento. Los ciclistas iniciaron el recorrido por una senda muy transitada por aquellos que practican esta actividad. Ingresaron por el llamado río seco, un canal que se extiende por áreas cercanas a varios countries de esa localidad y termina en la zona de la escuela de Agricultura, en Horco Molle.
En plena marcha, en momentos en que este grupo de deportistas atravesaba una especie de cañón, con paredes altas a los costados, unos desconocidos salieron de la vegetación e interceptaron a los bikers. “A la altura del predio donde funcionaba el boliche ‘Coyote’, hacia el río, nos saltaron cuatro personas desde el barranco del río. Nos pararon la marcha con palos y piedras. Una de ellas estaba armada con una especie de tumbera”, contó Ricardo Salguero, una de las víctimas.
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El biker y otro compañero del equipo encabezaban la hilera cuando se toparon con estas personas. Los desconocidos comenzaron a lanzarles piedras al cuerpo y avanzaron contra ellos. “A Germán le pegan en el antebrazo con una piedra. Tengo un hematoma en la pierna izquierda, producto de una pedrada. Justo en ese tiempo logran alcanzarme y agarrar mi bicicleta”, relató Salguero.
Según las descripciones de los testigos, los cuatro individuos “se movieron como pirañas”. Así atacaron a Salguero: le sacaron la bicicleta de alta competición y un equipo GPS, que medía las pulsaciones, entre varias funciones. También le sustrajeron elementos como una remera de carrera.
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“Al obtener ya mi bici, nos dijeron que nos vayamos y nos amenazaron con disparar si nos dábamos vuelta, que no los miráramos. Regresaron por el barranco y se escaparon, en dirección a las fincas de limones que están hacia el norte”, contó Salguero, quien informó que realizó luego una denuncia por la sustracción de la bicicleta y demás artículos en la comisaría de Cebil Redondo.
Zona insegura
La ruta de entrenamiento elegida por este grupo de amigos se caracteriza por un tránsito fluido: “se asemeja al ritmo de la avenida Presidente Perón (desde las 14 a las 17), pero para los bikers”, según coincidieron los testigos. Durante el ataque, otro conjunto de ciclistas circulaba cerca del lugar. “Si no nos pasaba a nosotros, les iba a suceder a esas personas”, enfatizó Salguero.
“Fue la primera vez que sufrí un robo, pero no fue la primera vez que roban en esa zona. Ayer sustrajeron una bici en el mismo río”, agregó.
Salguero fue la principal víctima, pero Germán (pidió que su apellido no sea publicado) sufrió un golpe en el brazo. “No me lanzó, sino que me dio de lleno con una piedra del tamaño de una criatura en el brazo para que suelte la bicicleta. Por suerte, sólo sufrí un hematoma”, contó el otro damnificado. Entonces, Germán reaccionó ante el avance de los sujetos y le dio un puñetazo a uno de ellos. “Eso me permitió salir con la bicicleta. Esperaba sentir el ruido del tiro cuando salía (…) Nunca dejé de mirar a los ojos del que me apuntaba con la pistola. Siempre se mostró firme. Hoy (por ayer) no quiso disparar, mañana no sé…”, añadió.
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No fue la primera vez que los bikers protestan por falta de control en la zona de práctica. En mayo pasado, un centenar de ciclistas se movilizó desde Yerba Buena hasta la Casa de Gobierno y reclamó al Gobierno seguridad ante los casos de robos.
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