El superclásico del fútbol argentino es reconocido en todo el mundo por la pasión que genera, por el color y, algunas veces, también por la violencia que se desata entre los hinchas. Esta vez, esa violencia apareció a más de 1.300 kilómentros de donde se jugó el partido: Tucumán.
Ayer, en una estación de GNC de avenida Colón y Florida, se mezclaron simpatizantes de River y de Boca y la cosa no terminó bien. Durante el partido, que se vivió en un clima tenso, hubo insultos cruzados, trompadas y hasta se lanzaron objetos de un bando a otro.
Un video compartido en las redes sociales muestra el momento de la pelea entre las personas que estaban en el lugar, que comenzó tras el segundo gol que le hizo Boca a River.
Desde la semana pasada, los encuentros de la Superliga Argentina sólo se pueden ver pagando el "pack fútbol", con un abono extra que ofrecen las empresas de videocable para contar con el servicio. Es por eso que ayer la mayoría de los bares de la provincia estuvieron colapsados por el superclásico.
El partido
Boca manda en la Superliga, que lo tiene como líder a nueve puntos de sus escoltas. Ayer visitó el Monumental y con el 2-1 sumó su octava victoria en fila en el torneo. Fue ante River, que intentó en vano superar la eliminación de la Libertadores y quedó a 12 unidades. Pitana, de polémica labor, expulsó bien a Fernández y mal a Cardona, autor de un golazo. Nández y Ponzio marcaron los otros.