Ante la intransigencia de dos de las cuatro cámaras empresarias de ómnibus de larga distancia, el Ministerio de Trabajo resolvió hoy aplicar a esos 20.000 choferes una mejora salarial del 21%, retroactiva a abril último y en tres tramos, por lo que por el momento la Unión Tranviarios Automotor (UTA) decidió levantar los paros.
"La UTA aguardará hasta el 5 de septiembre próximo y, si esas dos cámaras patronales aún no lo aplicaron, habrá de inmediato paros", sentenció el secretario de Prensa de la organización, Mario Caligari, quien remarcó que el incremento de los haberes se producirá en tres cuotas y será retroactivo a abril último.
Los 20.000 choferes de larga distancia no percibían un aumento desde abril, fecha de vencimiento de la última paritaria, por lo que ahora el índice convenido se aplicará de forma retroactiva.
El secretario general de la UTA, Roberto Fernández, había descartado esta mañana la posibilidad de una huelga general en la actividad de larga distancia ante el acuerdo con dos de las cuatro cámaras, aunque no había rechazado las protestas en las líneas cuyos empresarios no se aviniesen a rubricar ese convenio.
Fernández, integrante de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT) y secretario de Vivienda y Turismo de la CGT, explicó que las negociaciones se sucedían con las cámaras patronales desde hace tres meses sin propuestas o "una mínima recomposición", por lo que Trabajo impuso hoy el aumento.
"Las cámaras deben presentar sus propios reclamos en otro lado, en lugar de amenazar con la pérdida de fuentes laborales por la supuesta falta de dinero, porque no será permitido", concluyó el sindicalista. (Télam)