CARDIFF.- Otra vez él, otra vez Cristiano Ronaldo. El portugués se reservó de nuevo los focos en la final de la Liga de Campeones al anotar dos goles para comenzar a abrazar su quinto Balón de Oro.
Naturalmente, el portugués fue proclamado el mejor futbolista del partido jugado en Cardiff, donde ratificó su espectacular momento a sus 32 años. En una noche mágica, Cristiano concluyó la actual edición del torneo con 12 goles, uno más que Lionel Messi. Y diez de ellos llegaron a partir de cuartos de final, lo que explica su tremenda influencia en el trofeo. Además ayer alcanzó la mágica cifra de 600 tantos en su carrera.
“He hecho fue un final de temporada espectacular. Me preparé para esto porque las cosas grandes se ganan en el final”, dijo Cristiano. “Marqué dos goles en la final; tres al Atleti; fui el goleador de la Champions otra vez, batí otro récord”, enumeró el astro portugués. Los dos goles explicaron lo que es el nuevo Cristiano, un jugador en reinvención dentro de una lucha contra el tiempo que no quiere perder. Ahora es un jugador más concreto, más venenoso. Dos tiros de primera, dos goles.
“Demasiada humildad no es buena. Tenemos que demostrar nuestro carácter y quién es el mejor”, así se presentó el portugués a la final. No se trataba de soberbia, según se vio, sino de una ilimitada confianza en su capacidad, en su calidad y en su trabajo. (DPA)