Crece la tasa de homicidios en Tucumán: se produjeron 58 crímenes en lo que va del año
El 76 % de los que se cometieron en 2017 se dio por peleas entre personas que se conocían de antemano. Seis víctimas de asalto fueron asesinadas, al igual que cuatro asaltantes y tres personas que quisieron evitar robos a terceros.
“Me puse como loco, no sabía lo que estaba haciendo. Me arrepiento, me puse mal por mi hijo que tiene un problema. No me daba cuenta de lo que estaba haciendo en esos momentos”. Esas habrían sido las palabras que utilizó Julio César Juárez cuando declaró, llorando, en Tribunales. Está acusado de haber baleado en el abdomen a un joven luego de haber protagonizado un accidente el sábado por la noche en la esquina de Juan B. Justo y Martín Berho.
Esa noche, Juárez, de 56 años, circulaba en una moto con su pareja y su hijo menor de edad. Al llegar a ese lugar, chocó contra el rodado en el que viajaban Maximiliano Salazar (23) y su sobrina, Yamila Franchini. Por el roce, todos cayeron al suelo. La acompañante de Salazar dijo que el hombre comenzó a golpear a su tío y después le disparó. “También amenazó con dispararme y cuando lo insulté, comenzó a agredirme físicamente. Luego la mujer y el chico, que habían visto todo, se sumaron a la golpiza”, denunció la joven, que respiró aliviada cuando le dijeron que el acusado de tentativa de homicidio seguirá detenido. El imputado, que lloró cuando declaraba en Tribunales, no pudo desmentir esa parte de la historia.
Ese violento caso es un ejemplo de lo que ocurre en la provincia. Es también una de las razones por las que se podría incrementar la tasa de homicidios en estas tierras. En los primeros cinco meses del año, se produjeron al menos 58 crímenes, registrados en LA GACETA. Con un promedio de más de 11 por mes, con seguridad se superarán los 119 que estimó la Policía que se registraron en 2016, y las cifras serán mucho más impactantes que las 105 muertes en 2015 que figuran en el informe de la Corte Suprema de Justicia en base a los datos cotejados con la fuerza.
Por el momento no se puede realizar la tasa interanual porque el máximo tribunal de la provincia no oficializó el informe de 2016. Ese estudio, el más serio al que se puede acceder, es realizado por los poderes Judicial y Ejecutivo. La Policía pasa los datos y, expediente por expediente, son analizados por los especialistas para elaborar el trabajo.
Análisis
De los 58 homicidios, al menos 44 (representa el 76%) están vinculados a casos de violencia intravecinal e intrafamiliar; si se prefiere, son casos en que la víctima conocía a la persona que le arrancó la vida. En el informe de 2015, los especialistas de la Corte anunciaron que casi el 50% de los crímenes tenían que ver con esta situación, pero al mismo tiempo advertían que esos números crecerían. En tanto que los crímenes vinculados a robos representan el 24%.
La droga, ya sea por peleas entre adictos, ajuste de cuentas protagonizados por transas en contra de sus clientes o guerras entre clanes dedicadas al narcomenudeo, estuvo presente en 13 de esos 44 crímenes, lo que representa algo más del 22%. El último homicidio registrado en 2017 justamente tiene que ver con este tema.
Matías “Geniolcito” Rodríguez murió el lunes por la tarde después de haber recibido al menos siete disparos. Sus atacantes, identificados como “Mudo” y “Ponja”, integrantes del clan Acevedo, habrían elaborado un plan para asesinarlo porque, según los familiares de la víctima, pensaban que se dedicaría a la venda de drogas en el barrio “El Sifón”, que ellos dominan, según se sospecha.
Este grupo, que está vinculado a la barra brava de Atlético, participó de un enfrentamiento armado en la puerta de un boliche con los miembros del clan Toro en un hecho que se registró en la zona del Abasto en abril pasado y en el que murió Roberto Zelarayán. En esa oportunidad, según confiaron los investigadores, los agresores realizaron más de 60 disparos cuando decenas de jóvenes salían del local bailable.
También se registraron tres femicidios, tres víctimas que fallecieron por proyectiles que salieron de armas de policías; y se registró un filicidio en estos primeros cinco meses del año. Otras tres personas murieron al quedar atrapadas en enfrentamientos armados en los que no habían participado.
Otra mirada
Andrés Díaz Reyes (Burruyacu), David Aragón y Daniel Lucena, (capital), Pedro Antonio Jiménez (Los Aguirre), Nicolás Correa (Famaillá) y Mario Oreste (El Cadillal), son los nombres de las personas que murieron en manos de sus asaltantes en lo que va del año. Salvo Díaz Reyes, a todas las otras víctimas las asesinaron para quitarles las motos o automóviles. Se mantiene el promedio de una víctima de homicidio en ocasión de robo por mes.
Sin embargo, hubo otros casos que se produjeron como consecuencia de un delito contra la propiedad. El policía Federal Lucas Abregú (Concepción), Carla Paz (capital) y Marcelo Gallardo (Alderetes) murieron cuando intentaron evitar asaltos. Sergio Aguilar, en tanto, perdió la vida al ser atropellado por un auto en el que viajaban asaltantes que eran perseguidos por la Policía.
También cuatro supuestos asaltantes murieron a manos de sus víctimas de robo, que actuaron en defensa propia. Tres casos fueron protagonizados por efectivos de las fuerzas de seguridad (un policía federal, un policía de la provincia y un gendarme). Todos recuperaron la libertad. El otro caso corresponde a un joven que recibió un disparo en Lules y todavía no se pudo hallar al autor.