El juez federal Rodolfo Canicoba Corral sobreseyó hoy al jefe de la central de inteligencia AFI, Gustavo Arribas, investigado por transferencias bancarias sospechosas vinculadas con el escándalo de corrupción brasileño conocido como "Lava Jato".
El juez hizo lugar al pedido de falta de acción que había realizado la defensa de Arribas, y a contramarcha de lo que solicitó el fiscal Federico Delgado, que se opuso al cierre de la causa por entender que debían buscarse más pruebas e interrogarse al "arrepentido" brasileño Leonardo Meirelles.
"El requerimiento debe describir un hecho (o más) pero que tenga, como mínimo, una apariencia de delito, más allá de la calificación legal que pudiera merecer, y esto es lo que está sujeto a las contingencias de la investigación. Y ¿cuál es el hecho aparentemente punible que el Sr. Fiscal endilga a Arribas? No sabemos", escribió Canicoba Corral en su resolución.
Hace dos semanas el jefe de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) pidió a la Justicia ser sobreseído en la causa que investiga si recibió casi U$S 600.000 por parte de la empresa constructora Odebrecht, por entender que no se encontraron pruebas en su contra y que las transferencias sospechadas "nunca existieron".
La defensa del funcionario y amigo del presidente Mauricio Macri aseguró que "las probanzas incorporadas a la causa se encuentran lejos de avalar la hipótesis delictiva trazada por el fiscal y en lo específico ponen en evidencia la manifiesta atipicidad de la conducta que se le reprocha".
La denuncia se originó a partir de un artículo publicado por el diario La Nación, donde señalaba que el funcionario recibió cinco transferencias de unos 600 mil dólares cuando vivía en Brasil, justo en el momento en que se definía en la Argentina el soterramiento de la línea ferroviaria Sarmiento.
La diputada nacional Elisa Carrió -cofundadora de la coalición gobernante Cambiemos- denunció el caso ante la Justicia y el funcionario justificó haber recibido solo unos U$S 70.000 en una sola transferencia por la venta de bienes de un departamento en Brasil, donde residía.
Según la defensa de Arribas, "entendemos que todas y cada una de las pruebas producidas en la causa permiten descartar de plano la hipótesis delictiva delineada en la denuncia y ponen en evidencia la manifiesta inexistencia de delito en el hecho que nos ocupa".
Aseguró que "no existe una sola prueba o indicio que permita siquiera vincular o atribuir algún tipo de participación de Arribas en la percepción de supuestos sobornos para que la empresa Odebrecht resulte adjudicada de la obra del soterramiento del Sarmiento".
Canicoba Corral coincidió con los términos planteados por la defensa y añadió: "Una investigación 'abierta' como nos propone el Representante del Ministerio Público Fiscal no puede prosperar so pena de convertirse en una 'excursión de pesca', mutando el derecho penal de Acto al de Autor. Esto es un principio del derecho penal moderno y que ha costado obtenerlo". (DyN)