09 Febrero 2017
BUENOS AIRES.- El integrante del consejo directivo de la CGT y titular del Sindicato de Guincheros y Maquinistas de Grúas Móviles, Roberto Coria, aseguró que la movilización convocada por la CGT para el 7 de marzo será muy importante, porque las respuestas que necesitan los sectores industrial y de servicios por parte del Gobierno nacional no fueron claras, y afirmó que la totalidad de los gremios y delegados de la actividad portuaria y marítima acompañará la protesta.
Coria, vocal de la reunificada CGT y también secretario de Finanzas de la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval (Fempinra) que conduce el triunviro Juan Carlos Schmid e integran dieciséis sindicatos, explicó que el movimiento obrero no se opone a las importaciones, aunque señaló que deben ser graduales tanto para la industria como para los servicios. “Pareciera que quienes causan todos los males son los trabajadores. Pero en realidad pagan las consecuencias de las equivocaciones. Los gremios garantizaron la gobernabilidad durante 2016, cuando podrían haber realizado protestas o haber presionado para que se convocase a reuniones. Del otro lado no se piensa igual. Sabíamos de los momentos difíciles heredados, de la situación del transporte y del puerto de Buenos Aires, por ejemplo, pero hubo una gran prudencia. Esperamos que el gobierno modifique la actitud este año”, puntualizó el gremialista.
En otro orden y, al referirse a la decisión oficial de traspasar el puerto a la Ciudad de Buenos Aires, Coria detalló que cuando se adoptan determinaciones que afectarán el aspecto logístico de exportaciones e importaciones, lamentablemente los trabajadores no participan. (Télam)
Coria, vocal de la reunificada CGT y también secretario de Finanzas de la Federación Marítima, Portuaria y de la Industria Naval (Fempinra) que conduce el triunviro Juan Carlos Schmid e integran dieciséis sindicatos, explicó que el movimiento obrero no se opone a las importaciones, aunque señaló que deben ser graduales tanto para la industria como para los servicios. “Pareciera que quienes causan todos los males son los trabajadores. Pero en realidad pagan las consecuencias de las equivocaciones. Los gremios garantizaron la gobernabilidad durante 2016, cuando podrían haber realizado protestas o haber presionado para que se convocase a reuniones. Del otro lado no se piensa igual. Sabíamos de los momentos difíciles heredados, de la situación del transporte y del puerto de Buenos Aires, por ejemplo, pero hubo una gran prudencia. Esperamos que el gobierno modifique la actitud este año”, puntualizó el gremialista.
En otro orden y, al referirse a la decisión oficial de traspasar el puerto a la Ciudad de Buenos Aires, Coria detalló que cuando se adoptan determinaciones que afectarán el aspecto logístico de exportaciones e importaciones, lamentablemente los trabajadores no participan. (Télam)