BRASILIA, Brasil.- Los presidentes de Brasil y Argentina, Michel Temer y Mauricio Macri, respectivamente, abogaron hoy por fortalecer el comercio y la integración regional como respuesta al proteccionismo económico del nuevo Gobierno de Estados Unidos. "Frente a tantas dudas que nos plantea el mundo, lo que nos tiene que quedar cada vez más claro es que tenemos que ser aliados", dijo Macri durante su primera visita de Estado en Brasilia desde que asumió el cargo en diciembre de 2015. "En tiempos de incertidumbre, la respuesta de Brasil y Argentina (...) es más cooperación y más integración", aseguró Temer.
Ninguno de los dos mencionó explícitamente a la nueva Administración de Donald Trump en la Casa Blanca, aunque las circunstancias a las que aludían quedaron claras, sobre todo después de que ambos mencionaran a México, el país más afectado por la política proteccionista anunciada por Trump. "Este cambio de escenario hace que México gire a mirar hacia el sur", consideró Macri.
Los dos gobernantes de las economías más fuertes de Sudamérica (Argentina tiene además el tercer Producto Interno Bruto de América Latina por detrás de Brasil y México) instaron a reforzar los vínculos no sólo con los países del continente, sino también con otras regiones del mundo, comunicó la agencia Dpa. Uno de temas concretos de la reunión fue la revitalización del casi paralizado Mercosur, el foro de integración sudamericano fundado en 1991 y del que ambos países forman parte junto con Paraguay y Uruguay.
Después de la suspensión de Venezuela en diciembre, Brasil y Argentina intentan cerrar las negociaciones para un tratado comercial con la Unión Europea que el bloque lleva a cabo, con interrupciones, desde 1999. Como parte de los intentos para revitalizar el Mercosur, Argentina propuso para marzo o abril una reunión de cancilleres con los países de la Alianza del Pacífico (México, Colombia, Chile y Perú).
Macri y Temer se esforzaron por mostrar su sintonía. Ambos presiden Gobiernos conservadores e impulsan una agenda de duras reformas para intentar superar la crisis económica en los dos países. Se trata de "un momento especial de convergencia", dijo Temer. "Somos socios, la rivalidad la dejemos para el deporte, sobre todo para el fútbol", bromeó por su parte el argentino. Aunque Macri había estado en agosto de 2016 en Río de Janeiro para la inauguración de los Juegos Olímpicos y visitó también Brasil como presidente electo en 2015, cuando todavía gobernaba Dilma Rousseff, la reunión con Temer representó su primera visita oficial a Brasilia.
El líder argentino llegó por la mañana y volvió a Buenos Aires pocas horas después. Además de reunirse con Temer, Macri estuvo con los presidente de las dos Cámaras del Parlamento brasileño, así como con la presidenta del Tribunal Supremo, Cármen Lúcia. El mandatario argentino estuvo en Brasilia acompañado entre otros por su jefe de Gabinete, Marcos Peña; la ministra de Exteriores, Susana Malcorra; el titular de Producción, Francisco Cabrera, y el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne.
Gabinete presidencial. Gentileza Télam.
Argentina es el tercer socio comercial para Brasil, por detrás de China y Estados Unidos, mientras que el mercado brasileño es el principal destino para las importaciones argentinas. Debido a la crisis em ambos países, el comercio bilateral alcanzó en 2016 sólo los U$S 22.500 millones, después de haber registrado una cifra récord de U$S 39.600 millones en 2011.
Brasil espera volver este año al crecimiento tras una de las peores crisis de su historia, con una recesión superior al tres por ciento de su PIB durante dos años consecutivos. Argentina, por su parte, lucha por controlar una inflación cercana al 40 % y por superar también la recesión.