"Está consternado; jamás quiso causar pánico ni desviar aviones"

La abogada del “bromista del aeropuerto” aseguró que su defendido está consternado por todo lo que desencadenaron sus palabras. Además, agregó que se trató de un problema de interpretación de los empleados de Latam y de una extralimitación del personal de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA).

Silvia Furque llegó a los tribunales federales para acompañar a Claudio Calvi, quien declara ante el juez Daniel Bejas. “¿Cómo puede poner una bomba en un avión que despegó en Buenos Aires?”, se preguntó la abogada. “Yo creo que (la empleada de Latam) se extralimitó en la interpretación. La persona que cometió un delito no se va a poner a decir lo que hizo y luego se va a quedar adentro del aeropuerto como el resto de la gente. Porque a él lo detuvieron 15 minutos más tarde”, argumentó.

Furque dijo que su defendido no conocía los protocolos de seguridad del aeropuerto. “Es más, ni se acuerda con exactitud lo que dijo. Se acuerda del contexto. Pero jamás quiso causar pánico ni revuelo ni desviar los aviones”, aseguró.

La letrada agregó que Calvi está consternado por todo lo que ocurrió. “Es una persona de bien, tiene trabajo, residencia acá, es conocido por muchas personas. Evidentemente fue una desinterpretación (sic) de lo que dijo. Cuando lo detienen, él les dice a los policías: ‘fue una broma ¿De qué se trata todo esto?’”, reprodujo la abogada.

Calvi está detenido desde el martes por la noche. De acuerdo con lo que informaron fuentes de Latam, se acercó al mostrador de la empresa y habría dicho: “si el avión que trae a mi suegra se cae, es porque puse una bomba”. A raíz de estas palabras, la PSA desencadenó un operativo de seguridad de gran magnitud.