"Vayan a buscar a los narcos de La Costanera y déjenme de romper las pelotas"

"Vayan a buscar a los narcos de La Costanera y déjenme de romper las pelotas". Esas fueron las únicas palabras que dijo el acusado de haber realizado la amenaza de bomba que generó caos y confusión anoche en el aeropuerto Benjamín Matienzo. Lo hizo durante su salida de los tribunales federales, donde finalmente no declaró ante el juez Daniel Bejas. 

El hombre, identificado como Claudio Calvi, de 62 años, será indagado mañana, alrededor de las 9, según informó su abogada, Silvia Furque. El individuo fue llevado nuevamente al centro de detención que tiene la  Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) en el aeropuerto donde permanecerá detenido. 

Escoltado por tres agentes de la PSA, el sospechoso, que vestía zapatillas, bermuda y una remera, llegó a las 10.45 a los tribunales con la cara tapada. Allí permaneció durante varias horas, pero no pudo contar su versión. "Mi cliente está arrepentido y desconsolado. Es un hombre grande que hizo una broma de chico; alguien que pone una bomba no se queda en el lugar", dijo la defensora del acusado.

El fiscal federal Pablo Camuña, quien lleva adelante la investigación, le dijo a LA GACETA que, en un principio, se lo acusaría por una interrupción en el servicio aéreo y por la gran movilización que generó.

"Será el juez (Bejas) quien determine si se lo va a procesar o no. Es una irresponsabilidad bastante grave. No es un chiste. Las consecuencias que sufrieron los pasajeros, varios nerviosos, como así también el otro avión que tenía que aterrizar y no pudo... Esta persona no pensó en los problemas de riesgo, como falta de combustible o de enviarlo a otro aeropuerto; es una consecuencia muy dañina y muy peligrosa para consideralo una broma", explicó Camuña. 

El revuelo se desencadenó cuando el hombre se acercó al mostrador de Latam para preguntar por la demora y había afirmado: “vine a esperar a mi suegra, si se cae el avión es porque yo puse una bomba”. Estas palabras obligaron a desplegar un operativo de seguridad de gran magnitud para desactivar la supuesta bomba que habría viajado a bordo del Airbus A320 del vuelo 4156 de Latam.

Los pasajeros de este avión tuvieron que esperar dentro de la aeronave que todos los equipajes fueran revisados. Además, un vuelo de Aerolíneas Argentinas fue desviado a Córdoba. Según se informó, los pasajeros de ese vuelo aún no retornaron a la provincia.  En el hall del aeropuerto también hubo caos y enojo entre las personas que esperaban a los viajeros.