09 Junio 2016
CON LOS PUESTEROS. El jefe de Gabinete de ministros, Marcos Peña, salió a recorrer el Mercado Central de Buenos Aires. DYN
El anhelo de muchos asalariados, de que el medio aguinaldo quede exento del Impuesto a las Ganancias, no se hará realidad. El primer pago del Sueldo Anual Complementario (SAC), que los trabajadores percibirán con el salario de julio, no será eximido de Ganancias, según lo anunció el jefe de Gabinete, Marcos Peña. El funcionario defendió los cambios que el Gobierno nacional aplicó, hasta ahora, en el cobro del tributo, y aseguró que, para este año, el principal objetivo del equipo económico es moderar la inflación.
“Por ahora no está previsto eximir de Ganancias al medio aguinaldo. El Gobierno hizo una reforma que fue muy importante, con casi $ 50.000 millones que se devolvió a los contribuyentes. Esto es lo que hemos podido hacer este año, sabiendo que la prioridad central es bajar la inflación”, argumentó el jefe de ministros.
Para los asalariados, la posibilidad de evitar el pago de Ganancias en el medio aguinaldo hubiese significado una bocanada de aire, en momentos en que la suba de precios ahoga el poder adquisitivo y las posibilidades de consumo. Sin embargo, el Gobierno nacional aún sostiene la vigencia de este tributo en el esquema impositivo, pese a que representa una proporción pequeña dentro de la recaudación total. El Gobierno nacional prevé cambios en el impuesto a partir del período fiscal 2017. Mientras tanto, la AFIP aguarda que los contribuyentes en relación de dependencia presenten sus declaraciones juradas antes de fines de mes.
Según un informe que elaboró el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa), la eliminación de Ganancias y del Impuesto a los Bienes Personales, que figura en el proyecto de blanqueo de capitales que el Gobierno envió al Congreso, es un avance hacia la racionalización del sistema tributario nacional. Además, Idesa subrayó que ambos impuestos representan, en conjunto, el 1,4% de la recaudación total del país.
“Ganancia y Bienes Personales son impuestos de muy baja recaudación que se superponen con los que cobran las provincias y los municipios. Además, imponen una innecesaria complejidad administrativa a los contribuyentes. Pero, por lejos, el desafío más importante es lograr que en un futuro cercano se reforme el sistema previsional para garantizar su sustentabilidad”, indicó la consultora.
Escasa proporción
En base a datos relevados por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), correspondientes a 2015, Idesa señaló que el impuesto a los Bienes Personales representa el 1,2% del total de la recaudación nacional. En tanto, Ganancia representa apenas el 0,2%. “Esto implica que el impacto total de la medida será una disminución del 1,4% en la recaudación impositiva total del país”, recalcó el informe.
La escasa participación los dos tributos en el volumen de la recaudación total muestra, según Idesa, que su contribución a las arcas fiscales es muy baja. Uno de los factores que explica su reducida eficacia es que las provincias son inducidas a mantener subvaluados los inmuebles de los ciudadanos a los fines de moderar la presión impositiva. “En este sentido, la eliminación de estos dos impuestos nacionales debería inducir a las provincias y a los municipios a actualizar sus catastros y a modernizar sus sistemas tributarios. Un desafío similar, pero mucho más complejo, es revisar otras superposiciones como la del IVA nacional con el impuesto a los Ingresos Brutos provinciales y con las tasas municipales sobre el comercio y la industria”, observó la consultora.
Para hacer sustentable el sistema impositivo, de modo que no afecte las finanzas del Gobierno nacional, Idesa propuso que es imprescindible una reforma previsional. “El pago de jubilaciones representa el 40% del gasto público nacional. A esto se suma la devolución del 15% de coparticipación a las provincias y el impacto del continuo envejecimiento de la población. Este tarea figura en el proyecto de blanqueo de capitales que impulsa el Poder Ejecutivo, y que recaerá en un Consejo de Sustentabilidad Previsional. “No sólo el futuro del sistema previsional sino la sustentabilidad de todo el Estado nacional dependen de que esta comisión sea dotada de los insumos técnicos y políticos acordes a la complejidad e importancia del tema”, concluyó Idesa.
“Por ahora no está previsto eximir de Ganancias al medio aguinaldo. El Gobierno hizo una reforma que fue muy importante, con casi $ 50.000 millones que se devolvió a los contribuyentes. Esto es lo que hemos podido hacer este año, sabiendo que la prioridad central es bajar la inflación”, argumentó el jefe de ministros.
Para los asalariados, la posibilidad de evitar el pago de Ganancias en el medio aguinaldo hubiese significado una bocanada de aire, en momentos en que la suba de precios ahoga el poder adquisitivo y las posibilidades de consumo. Sin embargo, el Gobierno nacional aún sostiene la vigencia de este tributo en el esquema impositivo, pese a que representa una proporción pequeña dentro de la recaudación total. El Gobierno nacional prevé cambios en el impuesto a partir del período fiscal 2017. Mientras tanto, la AFIP aguarda que los contribuyentes en relación de dependencia presenten sus declaraciones juradas antes de fines de mes.
Según un informe que elaboró el Instituto para el Desarrollo Social Argentino (Idesa), la eliminación de Ganancias y del Impuesto a los Bienes Personales, que figura en el proyecto de blanqueo de capitales que el Gobierno envió al Congreso, es un avance hacia la racionalización del sistema tributario nacional. Además, Idesa subrayó que ambos impuestos representan, en conjunto, el 1,4% de la recaudación total del país.
“Ganancia y Bienes Personales son impuestos de muy baja recaudación que se superponen con los que cobran las provincias y los municipios. Además, imponen una innecesaria complejidad administrativa a los contribuyentes. Pero, por lejos, el desafío más importante es lograr que en un futuro cercano se reforme el sistema previsional para garantizar su sustentabilidad”, indicó la consultora.
Escasa proporción
En base a datos relevados por la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), correspondientes a 2015, Idesa señaló que el impuesto a los Bienes Personales representa el 1,2% del total de la recaudación nacional. En tanto, Ganancia representa apenas el 0,2%. “Esto implica que el impacto total de la medida será una disminución del 1,4% en la recaudación impositiva total del país”, recalcó el informe.
La escasa participación los dos tributos en el volumen de la recaudación total muestra, según Idesa, que su contribución a las arcas fiscales es muy baja. Uno de los factores que explica su reducida eficacia es que las provincias son inducidas a mantener subvaluados los inmuebles de los ciudadanos a los fines de moderar la presión impositiva. “En este sentido, la eliminación de estos dos impuestos nacionales debería inducir a las provincias y a los municipios a actualizar sus catastros y a modernizar sus sistemas tributarios. Un desafío similar, pero mucho más complejo, es revisar otras superposiciones como la del IVA nacional con el impuesto a los Ingresos Brutos provinciales y con las tasas municipales sobre el comercio y la industria”, observó la consultora.
Para hacer sustentable el sistema impositivo, de modo que no afecte las finanzas del Gobierno nacional, Idesa propuso que es imprescindible una reforma previsional. “El pago de jubilaciones representa el 40% del gasto público nacional. A esto se suma la devolución del 15% de coparticipación a las provincias y el impacto del continuo envejecimiento de la población. Este tarea figura en el proyecto de blanqueo de capitales que impulsa el Poder Ejecutivo, y que recaerá en un Consejo de Sustentabilidad Previsional. “No sólo el futuro del sistema previsional sino la sustentabilidad de todo el Estado nacional dependen de que esta comisión sea dotada de los insumos técnicos y políticos acordes a la complejidad e importancia del tema”, concluyó Idesa.
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