14 Abril 2016
En los alrededores del Mercofrut no se salva nadie: ni los que transportan grandes cantidades de plata para realizar compras mayoristas ni los jóvenes que se dedican a hacer “changuitas” para ganar unas monedas. Todos son presas de los asaltantes que merodean en esa zona de la capital.
El balazo que recibió Antonio Saracho, sin embargo, sorprendió a todos. “Hacía rato que no sucedía algo así; en una época sí estábamos de turno, pero eso ya se había calmado”, comentó Juan Carlos Medina, vicepresidente del Mercofrut.
Medina se refería al atrevimiento de los delincuentes de apretar el gatillo porque -según aclaró- los robos que sufren en la zona son moneda corriente.
“En los alrededores estamos teniendo robos, adentro no. Suceden más que nada a la madrugada, como a las 3.30 o 4, cuando comienzan a llegar los trabajadores”, indicó. “Los que peor la llevan son los changarines, que son los que menos tienen. A ellos los amenazan con armas y hasta hacen tiros al aire para amedrentarlos y robarles las bicicletas o las zapatillas”, remarcó. Ante los reiterados ataques, ellos comenzaron a organizarse en grupo para dirigirse su puesto de trabajo.
Dentro del predio del Mercofrut hay personal policial que intenta brindarles seguridad. “No podemos decir que la Policía no nos colabora. Ahora están saliendo a cuidar a los alrededores también, pero no dan abasto”, explicó Medina.
Otro tipo de delito que denunció el vicepresidente del Mercofrut suele producirse en la ruta 9, por las noches, a la altura de Los Puestos o de Arroyo Mixta. “Los delincuentes simulan ser policías que están haciendo controles, hasta ponen los conitos en la ruta. A la gente que viene de Santiago o de Chaco a traer o buscar mercadería los obligan a parar y les roban todo. Esto había cesado el año pasado, pero en estos últimos meses volvió”, advirtió.
El balazo que recibió Antonio Saracho, sin embargo, sorprendió a todos. “Hacía rato que no sucedía algo así; en una época sí estábamos de turno, pero eso ya se había calmado”, comentó Juan Carlos Medina, vicepresidente del Mercofrut.
Medina se refería al atrevimiento de los delincuentes de apretar el gatillo porque -según aclaró- los robos que sufren en la zona son moneda corriente.
“En los alrededores estamos teniendo robos, adentro no. Suceden más que nada a la madrugada, como a las 3.30 o 4, cuando comienzan a llegar los trabajadores”, indicó. “Los que peor la llevan son los changarines, que son los que menos tienen. A ellos los amenazan con armas y hasta hacen tiros al aire para amedrentarlos y robarles las bicicletas o las zapatillas”, remarcó. Ante los reiterados ataques, ellos comenzaron a organizarse en grupo para dirigirse su puesto de trabajo.
Dentro del predio del Mercofrut hay personal policial que intenta brindarles seguridad. “No podemos decir que la Policía no nos colabora. Ahora están saliendo a cuidar a los alrededores también, pero no dan abasto”, explicó Medina.
Otro tipo de delito que denunció el vicepresidente del Mercofrut suele producirse en la ruta 9, por las noches, a la altura de Los Puestos o de Arroyo Mixta. “Los delincuentes simulan ser policías que están haciendo controles, hasta ponen los conitos en la ruta. A la gente que viene de Santiago o de Chaco a traer o buscar mercadería los obligan a parar y les roban todo. Esto había cesado el año pasado, pero en estos últimos meses volvió”, advirtió.