28 Enero 2016
Un oficial que prestaba servicio en la comisaría de Lomas de Tafí fue separado de la Policía luego de que la Justicia comprobara que cometió varios robos en la dependencia donde trabajaba.
Fuentes judiciales informaron ayer que se confirmó la detención del cabo José Montero quien es acusado de haber robado las ruedas de un auto que estaba secuestrado en la comisaría de Lomas. Pero el oficial, que ya fue alojado en el cuartel de los Bomberos, no habría robado sólo los neumáticos. Sino que también se habría apoderado de otros artefactos que tenía el vehículo.
Los compañeros de Montero habían notado que el oficial se venía comportado de una manera extraña en los últimos días. Y fueron ellos mismos quienes el lunes le informaron al jefe de esa dependencia lo que estaba ocurriendo.
Al parecer, según sostiene la investigación que realizó el comisario principal Miguel Juárez, jefe de zona de la Unidad Regional Norte (URN), el imputado fue descubierto por un oficial de guardia saqueando un auto que estaba secuestrado en esa dependencia.
Pero esa no sería la única evidencia que pesa en su contra, porque otro uniformado notó las irregularidades que presentaba el vehículo que estaba secuestrado. Esto quiere decir que en el libro de guardia, donde los uniformados notifican las novedades que ocurren durante un turno, habría un pormenorizado inventario en el que quedaron registrados los objetos robados por Montero.
Confesar un delito
Luego de que los uniformados le informaron a sus superiores lo que estaba pasando en la comisaría, el comisario Juárez ordenó que se iniciará una investigación para constatar la veracidad de la denuncia. De esa manera, fue que ordenaron que el personal de las guardias salientes como las entrantes permanecieran en la dependencia hasta esclarecer el hecho.
Ante ese tenso contexto, el acusado terminó confesando los robos que había cometido. Según fuentes de la investigación, el cabo Montero reconoció entre sollozos -el oficial habría implorado que no lo detuvieran- que él había sacado las ruedas del vehículo secuestrado para colocárselas a su propio auto. Además, las fuentes consultadas por este diario, remarcaron que el auto de Montero sería el mismo modelo del vehículo que estaba incautado.
Con estas versiones testimoniales y las evidencias en su poder, el comisario Juárez presentó la investigación en la Fiscalía II que está siendo subrogada por la fiscala Adriana Giannoni quien solicitó la detención del cabo que fue confirmada ayer. “Él cometió un delito lo que automáticamente lo deja fuera de la institución que lo considera como personal pasivo”, explicó a su vez una importante fuente policial.
Fuentes judiciales informaron ayer que se confirmó la detención del cabo José Montero quien es acusado de haber robado las ruedas de un auto que estaba secuestrado en la comisaría de Lomas. Pero el oficial, que ya fue alojado en el cuartel de los Bomberos, no habría robado sólo los neumáticos. Sino que también se habría apoderado de otros artefactos que tenía el vehículo.
Los compañeros de Montero habían notado que el oficial se venía comportado de una manera extraña en los últimos días. Y fueron ellos mismos quienes el lunes le informaron al jefe de esa dependencia lo que estaba ocurriendo.
Al parecer, según sostiene la investigación que realizó el comisario principal Miguel Juárez, jefe de zona de la Unidad Regional Norte (URN), el imputado fue descubierto por un oficial de guardia saqueando un auto que estaba secuestrado en esa dependencia.
Pero esa no sería la única evidencia que pesa en su contra, porque otro uniformado notó las irregularidades que presentaba el vehículo que estaba secuestrado. Esto quiere decir que en el libro de guardia, donde los uniformados notifican las novedades que ocurren durante un turno, habría un pormenorizado inventario en el que quedaron registrados los objetos robados por Montero.
Confesar un delito
Luego de que los uniformados le informaron a sus superiores lo que estaba pasando en la comisaría, el comisario Juárez ordenó que se iniciará una investigación para constatar la veracidad de la denuncia. De esa manera, fue que ordenaron que el personal de las guardias salientes como las entrantes permanecieran en la dependencia hasta esclarecer el hecho.
Ante ese tenso contexto, el acusado terminó confesando los robos que había cometido. Según fuentes de la investigación, el cabo Montero reconoció entre sollozos -el oficial habría implorado que no lo detuvieran- que él había sacado las ruedas del vehículo secuestrado para colocárselas a su propio auto. Además, las fuentes consultadas por este diario, remarcaron que el auto de Montero sería el mismo modelo del vehículo que estaba incautado.
Con estas versiones testimoniales y las evidencias en su poder, el comisario Juárez presentó la investigación en la Fiscalía II que está siendo subrogada por la fiscala Adriana Giannoni quien solicitó la detención del cabo que fue confirmada ayer. “Él cometió un delito lo que automáticamente lo deja fuera de la institución que lo considera como personal pasivo”, explicó a su vez una importante fuente policial.
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