21 Octubre 2015

HOY
• A las 22, en el Centro Cultural Virla (25 de Mayo 265).
¿Alguna vez escuchaste cómo suena una viola caipira? ¿Y un cuatro venezolano?
Esta noche, en el auditorio del Centro Cultural Virla se escuchará el particular sonido de sus cuerdas, así como el de charangos y guitarras, en el Festival Internacional de Música Popular “Sonamos Latinoamérica”.
La música del interior de Brasil la trae Fabricio Conde, con su viola caipira. De Venezuela, con guitarra y cuatro, viene José Luis Lara, que además es gestor artístico de una de las sedes del Festival en su país.
De Santa Fe, nada menos que el Dúo Escaramujo, integrado por el charanguista Oscar Poli Gomítolo y Mariano Rodríguez en guitarras.
Los anfitriones tucumanos son Martín Páez de la Torre, compositor, guitarrista, charanguista, junto a Guillermo Saab, organizadores de la sede local.
Una cooperativa
“Esta es la segunda vez que ‘Sonamos...’ se hace en el Virla. Es una cooperativa de músicos que nació en Santa Fe cuyo director, Oscar Gomítolo, viene a tocar ahora. El festival ha ido creciendo a lo largo de nueve años y tiene ocho sedes en Latinoamérica. En 2014 viajé a participar en Colombia y en Venezuela, y vi cómo va creciendo y se va aggiornando en cada país según cada realidad. Se lleva a cabo en distintas fechas; en Lima y en Cuzco ya se hizo hace un mes”, informa Páez de la Torre.
Pero no sólo de cuerdas va el encuentro, sino que convoca toda la música latinoamericana, es decir, de todo y bien mezclado: desde una cantante peruana que canta acompañada por su charango hasta un grupo brasileño de ocho músicos.
Páez de la Torre cree que no hay otro festival internacional de música popular no comercial que convoque a tantos países y que esté organizado como cooperativa. “Es una manera de escapar de las programaciones estatales. Tenemos menos apoyo y es difícil organizarlo porque todo es bien a pulmón. Santa Fe, como fue la sede inicial, año a año va consiguiendo más recursos porque está muy instalado en la agenda cultural al convocar a no menos de cien músicos. La idea es hacer el encuentro para escuchar y dar a conocer una música, que sería imposible de otra manera”, sostiene.
A Salta
“El festival ya tiene una radio on line y uno de los objetivos fuertes es llegar a armar una escuela itinerante de música popular de raíz latinoamericana. Por eso siempre hay charlas en cada encuentro y se prioriza el intercambio”, apunta Saab.
El entusiasmo de “Sonamos ...” seguirá mañana, a las 22, en el Colegio Médico (Las Piedras 496) y el sábado se contagiará a Salta, donde se hará por primera vez.
• A las 22, en el Centro Cultural Virla (25 de Mayo 265).
¿Alguna vez escuchaste cómo suena una viola caipira? ¿Y un cuatro venezolano?
Esta noche, en el auditorio del Centro Cultural Virla se escuchará el particular sonido de sus cuerdas, así como el de charangos y guitarras, en el Festival Internacional de Música Popular “Sonamos Latinoamérica”.
La música del interior de Brasil la trae Fabricio Conde, con su viola caipira. De Venezuela, con guitarra y cuatro, viene José Luis Lara, que además es gestor artístico de una de las sedes del Festival en su país.
De Santa Fe, nada menos que el Dúo Escaramujo, integrado por el charanguista Oscar Poli Gomítolo y Mariano Rodríguez en guitarras.
Los anfitriones tucumanos son Martín Páez de la Torre, compositor, guitarrista, charanguista, junto a Guillermo Saab, organizadores de la sede local.
Una cooperativa
“Esta es la segunda vez que ‘Sonamos...’ se hace en el Virla. Es una cooperativa de músicos que nació en Santa Fe cuyo director, Oscar Gomítolo, viene a tocar ahora. El festival ha ido creciendo a lo largo de nueve años y tiene ocho sedes en Latinoamérica. En 2014 viajé a participar en Colombia y en Venezuela, y vi cómo va creciendo y se va aggiornando en cada país según cada realidad. Se lleva a cabo en distintas fechas; en Lima y en Cuzco ya se hizo hace un mes”, informa Páez de la Torre.
Pero no sólo de cuerdas va el encuentro, sino que convoca toda la música latinoamericana, es decir, de todo y bien mezclado: desde una cantante peruana que canta acompañada por su charango hasta un grupo brasileño de ocho músicos.
Páez de la Torre cree que no hay otro festival internacional de música popular no comercial que convoque a tantos países y que esté organizado como cooperativa. “Es una manera de escapar de las programaciones estatales. Tenemos menos apoyo y es difícil organizarlo porque todo es bien a pulmón. Santa Fe, como fue la sede inicial, año a año va consiguiendo más recursos porque está muy instalado en la agenda cultural al convocar a no menos de cien músicos. La idea es hacer el encuentro para escuchar y dar a conocer una música, que sería imposible de otra manera”, sostiene.
A Salta
“El festival ya tiene una radio on line y uno de los objetivos fuertes es llegar a armar una escuela itinerante de música popular de raíz latinoamericana. Por eso siempre hay charlas en cada encuentro y se prioriza el intercambio”, apunta Saab.
El entusiasmo de “Sonamos ...” seguirá mañana, a las 22, en el Colegio Médico (Las Piedras 496) y el sábado se contagiará a Salta, donde se hará por primera vez.
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