Al momento del accidente “no se veía a más de 15 metros por la intensa niebla”

La sirena de los bomberos voluntarios de Coronel Moldes comenzó a sonar a las 8.05. Era el anuncio para que los integrantes del escuadrón se desperezaran rápidamente en la fría mañana del jueves. “Esta es una localidad muy chiquita. La Policía nos había avisado de un accidente en la ruta 35, entre un colectivo, un camión y un auto”, contó Abel Bettiol, jefe del cuerpo activo de los bomberos de esa ciudad cordobesa.

Las tres dotaciones de la repartición (una unidad de corte, una ambulancia y una camioneta de logística) y cuatro ambulancias de centros médicos privados de Coronel Moldes, recorrieron los 22 kilómetros hasta el lugar del accidente. “El personal del colectivo había bajado en su totalidad a los pasajeros, con excepción de la persona fallecida y de una herida en estado delicado que estaba en la parte superior trasera derecha”, describió Bettiol.

El colectivo era de la empresa “Vía Bariloche”, que trasladaba un contingente de estudiantes secundarios tucumanos que habían estado en Bariloche en su gira de egresados. Eran 49 pasajeros (42 estudiantes) provenientes de Simoca y de Monteros.

Los chicos no se habían dado cuenta de que uno de sus compañeros había fallecido, de acuerdo con el relato que dio Bettiol. “No dejamos subir a nadie más al colectivo, y los pusimos del otro lado para que no vean la parte de la colisión. Creo que uno solo de los adultos se había dado cuenta de lo que pasaba”, agregó el bombero.

Poca visibilidad

Según las primeras determinaciones de los peritos, el colectivo viajaba de sur a norte y el camión lo hacía en sentido contrario. Uno de los factores del choque fue el climático, aseguró Bettiol. “La visibilidad era de no más de 15 metros, y por supuesto los choferes del camión y del colectivo tienen su versión”, explicó.

Esas versiones serían contradictorias y refieren a alguna mala maniobra del otro vehículo. El choque fue lateral, y según describió el jefe de bomberos de Coronel Moldes, fue como si los dos rodados se hubieran cruzado.

“El accidente ocurrió sobre la carpeta asfáltica. La caja del camión chocó con la parte del colectivo que sufrió las mayores consecuencias; el acoplado dio más atrás y sólo produjo algunas roturas de vidrios. Para que se entienda: la cola de cada uno de los vehículos estaba sobre la mano en la que circulaban, y el frente del otro lado. Los dos estaban en esa posición”, dijo Bettiol. “La visibilidad era tan escasa que un mínimo movimiento de uno de los rodados podría haber provocado el accidente. Pero cómo fue el choque lo van a determinar los peritos”, agregó.

El choque ocurrió a la altura del kilómetro 647 de la ruta provincial 35, entre las localidades de Río Cuarto y de Vicuña Mackenna, cuatro kilómetros al sur del camino que lleva a Coronel Moldes. El lugar es conocido como Villa Marcelina.

La víctima, Emerson Alfredo Cárdenas, de 17 años, viajaba en la última hilera de asientos. La adolescente que se encuentra grave, por su parte, iba un asiento más adelante. Luego del accidente entre el camión y el colectivo, un Peugeot 206 impactó con la parte trasera del segundo rodado. Sus ocupantes no sufrieron heridas de consideración.

“Encontramos al camionero en perfecto estado de salud, pero con una crisis nerviosa. De los pasajeros del colectivo había 15 personas con excoriaciones, luxaciones, crisis nerviosas y otras heridas leves, que fueron derivadas al hospital de Coronel Moldes. La persona que estaba más grave (y había quedado en el colectivo junto al fallecido) tenía un corte sobre la cabeza, porque le había pegado un parante del colectivo”, comentó Bettiol. Esta menor, y otra adolescente más, fueron internadas en el Hospital San Antonio de Padua, de Río Cuarto.

El resto de los tucumanos fueron llevados al dispensario de Coronel Moldes, donde les dieron una bebida caliente y le brindaron contención. Más tarde los alojaron en un hotel de esa localidad.

La mala noticia

Uno de los momentos más difíciles que se vivieron fue cuando tuvieron que darles la noticia de que Cárdenas había fallecido. “Nosotros regresamos a las 14 a la localidad y los chicos todavía no sabían nada. Le comentamos a la psicóloga que en todos los canales de televisión ya estaban hablando del caso, y se decidió darles la noticia”, relató el jefe de bomberos.

“Fue desesperante. Las mamás sufriendo por la situación y, al mismo tiempo, tuvieron que ser el sostén de esas criaturas”, reveló Bettiol. La difícil escena ocurrió tanto en el hospital donde estaban siendo atendidos los heridos, como en el hotel en el que eran contenidos la mayoría de los estudiantes.

A la tarde llegó un colectivo que trasladó a los chicos a Río Cuarto, desde donde saldrían en avión a Tucumán. “Están con acompañamiento psicológico”, indicó el comisario mayor Oscar Zuin al diario La Voz del Interior.

Los estudiantes eran alumnos de la escuela parroquial Nuestra Señora de Mercedes, de Simoca, y del colegio Santísimo Rosario, de Monteros. El camión, por su parte, era de la empresa Cerealista Moldes y viajaba sin carga.

“La empresa Vía Bariloche lamenta profundamente informar que esta mañana (por ayer), alrededor de las 8 horas, se produjo un triple accidente entre un micro de nuestra compañía, un camión y un auto. Como consecuencia del impacto informamos el deceso de un pasajero del micro, un herido grave y otras quince personas con heridas leves... Según las primeras informaciones, el accidente se produjo en medio de condiciones climáticas muy adversas con poca visibilidad y los peritos intentan determinar las causas... La empresa puso todos los elementos a disposición de la justicia para dilucidar los motivos de lo ocurrido; como asimismo se encuentra abocada a brindar toda la asistencia necesaria a los pasajeros y familiares”, consignó la empresa de colectivos en un comunicado de prensa.