01 Agosto 2015
CARAVANA. Como en la inauguración de otros tramos, decenas de vehículos acompañaron a la comitiva oficial. ARCHIVO PRENSA Y DIFUSIÓN
El gobernador José Alperovich recorrió esta mañana el último tramo de la nueva ruta 38, el cual estará habilitado al tránsito recién el martes. Se trata de 17 kilómetros de autovía que unen las ciudades de Aguilares y la de Juan Bautista Alberdi.
El mandatario y una comitiva oficial recorrieron las obras junto al intendente de Alberdi, Luis Campos, en una caravana de unos 400 vehículos, según manifestó el vicegobernador, Juan Manzur. Luego participaron de un acto político en Aguilares junto al intendente de esa ciudad, Agustín Fernández.
La ruta 38
La vía vincula la Capital con el sur de la provincia. Su alto nivel de inseguridad le había valido el apelativo de “La ruta de la muerte”. En efecto, el numeroso caudal de vehículos que la transitaban y accidentes -especialmente entre rastras cañeras y vehículos de menor porte- requería un cambio, según contempló el Gobierno.
La Dirección Nacional de Vialidad (DNV) dirigió todo el desarrollo del proyecto, que fue financiado con fondos no reintegrables del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Originalmente, la obra de 90 kilómetros de distancia, no debía superar los $ 260 millones, sin embargo, la cifra trepó otros $ 500 millones. El monto final fue de unos $ 750 millones.
El mandatario y una comitiva oficial recorrieron las obras junto al intendente de Alberdi, Luis Campos, en una caravana de unos 400 vehículos, según manifestó el vicegobernador, Juan Manzur. Luego participaron de un acto político en Aguilares junto al intendente de esa ciudad, Agustín Fernández.
La ruta 38
La vía vincula la Capital con el sur de la provincia. Su alto nivel de inseguridad le había valido el apelativo de “La ruta de la muerte”. En efecto, el numeroso caudal de vehículos que la transitaban y accidentes -especialmente entre rastras cañeras y vehículos de menor porte- requería un cambio, según contempló el Gobierno.
La Dirección Nacional de Vialidad (DNV) dirigió todo el desarrollo del proyecto, que fue financiado con fondos no reintegrables del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Originalmente, la obra de 90 kilómetros de distancia, no debía superar los $ 260 millones, sin embargo, la cifra trepó otros $ 500 millones. El monto final fue de unos $ 750 millones.
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