10 Octubre 2014
LA PAZ.- El presidente de Bolivia, Evo Morales, es según las encuestas el favorito para ganar este domingo las elecciones y lograr su tercer mandato consecutivo, que lo llevaría a gobernar hasta 2020.
El mandatario, de raíces aymaras, venció la primera vez con un 53,74 % en 2005 y la segunda con un 64,22 % en 2009. También salió airoso de un referendo revocatorio de mandato con un 67,43 % en 2008. Está al frente del país desde enero de 2006. Las encuestas hechas por Estudios Mori, Tal Cual e Ipsos Apoyo lo ubican favorito para ganar por tercera vez con un 55 % de apoyo, en promedio.
Morales aventaja por más de 40 puntos a su rival más cercano, el empresario Samuel Doria Medina, de la centroderechista Unidad Demócrata (UD). Y por mayor margen al ex presidente Jorge Quiroga, del Partido Demócrata Cristiano (PDC), al ex alcalde de la Paz Juan del Granado, del Movimiento Sin Miedo (MSM) y al indígena amazónico Fernando Vargas, del Partido Verde (PVB), sus otros adversarios en la contienda.
El Tribunal Supremo Electoral de Bolivia habilitó a 5.973.901 millones de personas para elegir el domingo presidente, vicepresidente, 36 senadores y 130 diputados.
Por segunda vez se podrá votar además desde el extranjero. Más de 272.000 personas están habilitadas para sufragar en 69 ciudades de 33 países.
El voto en Bolivia es obligatorio y una ausencia injustificada es sancionada. Por ello la participación alcanzó un 94 % en las elecciones de 2009. Si el ganador de la primera ronda no obtiene el 50 % más un voto y un margen superior de 10 % sobre el segundo más votado, está previsto celebrar una segunda ronda el 7 de diciembre. El nuevo mandato es para el período 2015-2020. Otro aspecto que destaca de los actuales comicios es la inclusión de un 52 % de mujeres candidatas a senadoras y diputadas.
Morales, de 55 años, fue reacio en la campaña electoral al debate con sus adversarios políticos, decisión criticada por su mentor político, el sacerdote y ex viceministro de Gobierno Rafael Puente. “La negativa del partido de gobierno a participar en debates (porque supuestamente en las candidaturas de oposición no hay interlocutores válidos), es una altanería poco democrática”, sostuvo. La nueva Constitución no permite otra reelección más de Morales después de 2020.
Los analistas políticos han descartado una sorpresa de los cuatro candidatos de los partidos que se enfrentan a Morales. “La oposición ganando las elecciones no podría gobernar, no sabrían qué hacer. Por eso la elección del domingo será legislativa”, señaló el analista y ex vocal electoral Jorge Lazarte.
Los cinco candidatos anunciaron que mantendrán el actual modelo económico.
Morales anuncia la industrialización de los recursos naturales, creación de una “ciudadela del conocimiento”, la construcción de hospitales especializados y la finalización de varias carreteras. Juan del Granado, ex aliado político de Morales, ofreció una agenda de carácter productivo, autonómico, de desarrollo humano, justicia independiente y unidad entre los pueblos.
Doria Medina, en su tercer intento por llegar a la presidencia, presentó un programa de oportunidades económicas y con seguridad ciudadana. Además basa su propuesta en que los jóvenes construyan su propia autonomía económica para que sean dueños de su destino. Y Quiroga, que es candidato por segunda vez y que estuvo durante unos meses en el cargo de presidente, pide aprovechar la coyuntura favorable de la economía boliviana. Pero promete terminar con el crimen organizado y la cocaína que se produce en el trópico de Cochabamba.
El indígena amazónico, Vargas exige restablecer la ética en la política, además de respeto al medio ambiente y la biodiversidad, que incluya el cambio de la matriz energética. (DPA)
El mandatario, de raíces aymaras, venció la primera vez con un 53,74 % en 2005 y la segunda con un 64,22 % en 2009. También salió airoso de un referendo revocatorio de mandato con un 67,43 % en 2008. Está al frente del país desde enero de 2006. Las encuestas hechas por Estudios Mori, Tal Cual e Ipsos Apoyo lo ubican favorito para ganar por tercera vez con un 55 % de apoyo, en promedio.
Morales aventaja por más de 40 puntos a su rival más cercano, el empresario Samuel Doria Medina, de la centroderechista Unidad Demócrata (UD). Y por mayor margen al ex presidente Jorge Quiroga, del Partido Demócrata Cristiano (PDC), al ex alcalde de la Paz Juan del Granado, del Movimiento Sin Miedo (MSM) y al indígena amazónico Fernando Vargas, del Partido Verde (PVB), sus otros adversarios en la contienda.
El Tribunal Supremo Electoral de Bolivia habilitó a 5.973.901 millones de personas para elegir el domingo presidente, vicepresidente, 36 senadores y 130 diputados.
Por segunda vez se podrá votar además desde el extranjero. Más de 272.000 personas están habilitadas para sufragar en 69 ciudades de 33 países.
El voto en Bolivia es obligatorio y una ausencia injustificada es sancionada. Por ello la participación alcanzó un 94 % en las elecciones de 2009. Si el ganador de la primera ronda no obtiene el 50 % más un voto y un margen superior de 10 % sobre el segundo más votado, está previsto celebrar una segunda ronda el 7 de diciembre. El nuevo mandato es para el período 2015-2020. Otro aspecto que destaca de los actuales comicios es la inclusión de un 52 % de mujeres candidatas a senadoras y diputadas.
Morales, de 55 años, fue reacio en la campaña electoral al debate con sus adversarios políticos, decisión criticada por su mentor político, el sacerdote y ex viceministro de Gobierno Rafael Puente. “La negativa del partido de gobierno a participar en debates (porque supuestamente en las candidaturas de oposición no hay interlocutores válidos), es una altanería poco democrática”, sostuvo. La nueva Constitución no permite otra reelección más de Morales después de 2020.
Los analistas políticos han descartado una sorpresa de los cuatro candidatos de los partidos que se enfrentan a Morales. “La oposición ganando las elecciones no podría gobernar, no sabrían qué hacer. Por eso la elección del domingo será legislativa”, señaló el analista y ex vocal electoral Jorge Lazarte.
Los cinco candidatos anunciaron que mantendrán el actual modelo económico.
Morales anuncia la industrialización de los recursos naturales, creación de una “ciudadela del conocimiento”, la construcción de hospitales especializados y la finalización de varias carreteras. Juan del Granado, ex aliado político de Morales, ofreció una agenda de carácter productivo, autonómico, de desarrollo humano, justicia independiente y unidad entre los pueblos.
Doria Medina, en su tercer intento por llegar a la presidencia, presentó un programa de oportunidades económicas y con seguridad ciudadana. Además basa su propuesta en que los jóvenes construyan su propia autonomía económica para que sean dueños de su destino. Y Quiroga, que es candidato por segunda vez y que estuvo durante unos meses en el cargo de presidente, pide aprovechar la coyuntura favorable de la economía boliviana. Pero promete terminar con el crimen organizado y la cocaína que se produce en el trópico de Cochabamba.
El indígena amazónico, Vargas exige restablecer la ética en la política, además de respeto al medio ambiente y la biodiversidad, que incluya el cambio de la matriz energética. (DPA)
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