10 Mayo 2014
EL COLOR Y EL CALOR CARIBEÑO. Rumba, son, chachachá, mambo o salsa; todos ritmos como para no quedarse sentado en la butaca.
Los españoles y los africanos que llegaron a Cuba fusionaron razas y de la unión surgió una música incomparable. Ahora, jóvenes artistas cubanos y tucumanos se juntan bajo el influjo de esos ritmos para cantarlos, bailarlos y contar su historia.
El espectáculo “De mi Cuba mi cantar”, que se presentará hoy a las 22, en el Centro Cultural Virla, cuenta con la voz de Damarys Figueroa, la música de Emilio Díaz (guitarra y bajo), Nicolás Tula (teclado) y “Café” Valdez (percusión), y el baile de Carla Grignola, María de los Angeles Aguilera, Martín Comba y Duniesky Ríos.
La propuesta ofrece un recorrido por la música cubana, desde sus orígenes hasta la actualidad. La rumba, el son, el mambo, el danzón, el chachachá y la salsa conforman, según explicó Damarys, un show multisensorial donde habrá interacción con el público.
La cantante y el bailarín Duniesky son los cubanos del grupo. Se conocieron con los tucumanos y formaron el colectivo musical Cubanísimo, que se luego se unió a Menage, para actuar en eventos privados. “Gustamos tanto que decidimos armar este espectáculo que estrenamos ahora y que ya tiene previstas presentaciones en el Julio Cultural y en el Septiembre Musical”, comentó Díaz.
Por su parte, Damarys -que reside en esta provincia desde hace dos años y está casada con un tucumano- dijo que está feliz de haber encontrado instrumentistas de gran sensibilidad musical. Y además relató algo de su historia. “De pequeña me gustaba cantar, disfrazarme y actuar. Mi madre se dio cuenta de mis aptitudes y me envió a la Escuela Elemental de Música. Estudié piano y canto. Luego, en la universidad, integré el Movimiento de Artistas Aficionados y representé a Cuba en una gira por Grecia”, contó.
Racismo
La bella mulata es graduada en letras y tiene un posgrado en filología; es máster en estudios socioculturales. Su tesis sobre los prejuicios raciales muestra que todavía persisten en la isla, a pesar del igualitarismo.
“Es fruto de los dos siglos de sometimiento a España y después a Estados Unidos, el país más racista del mundo. A pesar de todo, en Cuba son muy comunes las relaciones interraciales. Se ven muchas parejas de un blanco con una negra, o viceversa”, aclaró. Pero el racismo está presente, por ejemplo, en algunas frases populares como: “El negro, si no la hace de entrada, la hace a la salida”.
En lo literario, prefiere las novelas policiales. Entre sus favoritos figuran el sueco Henning Mankell y el cubano Leonardo Padura, que alcanzó celebridad internacional. “Es muy controvertido en mi país porque en sus novelas describe de manera crítica la realidad actual de Cuba -señaló-. Cuando cuento eso, la gente de inmediato me pregunta si no tuvo problemas con el gobierno. Y la respuesta es no, porque ya no hay censura. Desde los 80 existe libertad para hablar de cosas que antes no se tocaban”.
Entre las virtudes reconocidas del sistema cubano, la artista mencionó el alto nivel cultural de la población. Por ejemplo Duniesky, el bailarín del grupo (en su nombre se nota la influencia rusa sobre Cuba), es biólogo. Está en Tucumán porque vino a hacer su doctorado en el Instituto Miguel Lillo.
ESTA NOCHE
• A las 22, en el Centro Cultural Virla (25 de Mayo 265).
El espectáculo “De mi Cuba mi cantar”, que se presentará hoy a las 22, en el Centro Cultural Virla, cuenta con la voz de Damarys Figueroa, la música de Emilio Díaz (guitarra y bajo), Nicolás Tula (teclado) y “Café” Valdez (percusión), y el baile de Carla Grignola, María de los Angeles Aguilera, Martín Comba y Duniesky Ríos.
La propuesta ofrece un recorrido por la música cubana, desde sus orígenes hasta la actualidad. La rumba, el son, el mambo, el danzón, el chachachá y la salsa conforman, según explicó Damarys, un show multisensorial donde habrá interacción con el público.
La cantante y el bailarín Duniesky son los cubanos del grupo. Se conocieron con los tucumanos y formaron el colectivo musical Cubanísimo, que se luego se unió a Menage, para actuar en eventos privados. “Gustamos tanto que decidimos armar este espectáculo que estrenamos ahora y que ya tiene previstas presentaciones en el Julio Cultural y en el Septiembre Musical”, comentó Díaz.
Por su parte, Damarys -que reside en esta provincia desde hace dos años y está casada con un tucumano- dijo que está feliz de haber encontrado instrumentistas de gran sensibilidad musical. Y además relató algo de su historia. “De pequeña me gustaba cantar, disfrazarme y actuar. Mi madre se dio cuenta de mis aptitudes y me envió a la Escuela Elemental de Música. Estudié piano y canto. Luego, en la universidad, integré el Movimiento de Artistas Aficionados y representé a Cuba en una gira por Grecia”, contó.
Racismo
La bella mulata es graduada en letras y tiene un posgrado en filología; es máster en estudios socioculturales. Su tesis sobre los prejuicios raciales muestra que todavía persisten en la isla, a pesar del igualitarismo.
“Es fruto de los dos siglos de sometimiento a España y después a Estados Unidos, el país más racista del mundo. A pesar de todo, en Cuba son muy comunes las relaciones interraciales. Se ven muchas parejas de un blanco con una negra, o viceversa”, aclaró. Pero el racismo está presente, por ejemplo, en algunas frases populares como: “El negro, si no la hace de entrada, la hace a la salida”.
En lo literario, prefiere las novelas policiales. Entre sus favoritos figuran el sueco Henning Mankell y el cubano Leonardo Padura, que alcanzó celebridad internacional. “Es muy controvertido en mi país porque en sus novelas describe de manera crítica la realidad actual de Cuba -señaló-. Cuando cuento eso, la gente de inmediato me pregunta si no tuvo problemas con el gobierno. Y la respuesta es no, porque ya no hay censura. Desde los 80 existe libertad para hablar de cosas que antes no se tocaban”.
Entre las virtudes reconocidas del sistema cubano, la artista mencionó el alto nivel cultural de la población. Por ejemplo Duniesky, el bailarín del grupo (en su nombre se nota la influencia rusa sobre Cuba), es biólogo. Está en Tucumán porque vino a hacer su doctorado en el Instituto Miguel Lillo.
ESTA NOCHE
• A las 22, en el Centro Cultural Virla (25 de Mayo 265).