13 Marzo 2013
SÍMBOLO DE LIBERTAD Y GLORIA. El gorro frigio representa la libertad; los laureles, el triunfo, y el sol, la nueva nación.
La bandera, el himno, la escarapela y... Falta un símbolo patrio en esta lista. ¿Cuál es? Sí, el escudo. Cargado de simbolismos, nació por iniciativa de la Asamblea del Año XIII y constituyó uno de los grandes actos soberanos que marcaron el camino a la Independencia. Y, aunque quizás para muchos haya pasado inadvertida, la de ayer no fue una fecha más en la historia argentina: se cumplieron 200 años de su oficialización.
El escudo nacional reemplazó al que llevaba las armas reales de España como sello para autenticar los documentos oficiales (había sido utilizado durante los años del virreinato).
La historiografía sostiene que se le encargó su confección al diputado por San Luis, Agustín Donado, quien, a su vez, se la confió al grabador Juan de Dios Rivera. Con él fueron sellados algunos documentos emitidos por la Asamblea y el 12 de marzo de 1813 la institución lo aceptó oficialmente, según explica el sitio del Senado de la Nación Argentina (senado.gov.ar).
Un paso fundamental
La creación y la utilización del escudo constituyó un paso más en el camino que llevó a la Declaración de la Independencia. "Fue un hecho muy importante cuyos antecedentes se remontan en el tiempo. Como consecuencia de la Batalla de Tucumán cayó el Primer Triunvirato. El Segundo Triunvirato convocó a la Asamblea, que estaba compuesta por hombres independentistas. Su misión era declarar la Independencia y constituir el Estado de las provincias unidas. No logró ninguna de las dos cosas, pero sí tomó una serie de medidas muy importantes, como la abolición de la esclavitud, y oficializó dos símbolos patrios: el himno y el escudo. Además, suprimió definitivamente la advocación de que en el Río de la Plata se gobernaba en nombre de Fernando VII. Es decir, a partir de ese momento se empezó a gobernar oficialmente en nombre del pueblo. Es un antecedente fundamental de la declaración de la Independencia", detalló Luis Yanicelli, presidente del Instituto Belgraniano Tucumán.
Desconocedores
El historiador destacó que el escudo posee el mismo rango de importancia que los otros símbolos patrios y que lo llevan todos los sellos oficiales. Pero lamentó que su historia no esté más difundida. "Los argentinos somos grandes desconocedores de los símbolos de nuestra historia. Hubo generaciones que hicieron grandes cosas por la patria y acontecimientos que no se conocen y que podrían enseñarnos mucho", destacó Yanicelli.
El escudo nacional reemplazó al que llevaba las armas reales de España como sello para autenticar los documentos oficiales (había sido utilizado durante los años del virreinato).
La historiografía sostiene que se le encargó su confección al diputado por San Luis, Agustín Donado, quien, a su vez, se la confió al grabador Juan de Dios Rivera. Con él fueron sellados algunos documentos emitidos por la Asamblea y el 12 de marzo de 1813 la institución lo aceptó oficialmente, según explica el sitio del Senado de la Nación Argentina (senado.gov.ar).
Un paso fundamental
La creación y la utilización del escudo constituyó un paso más en el camino que llevó a la Declaración de la Independencia. "Fue un hecho muy importante cuyos antecedentes se remontan en el tiempo. Como consecuencia de la Batalla de Tucumán cayó el Primer Triunvirato. El Segundo Triunvirato convocó a la Asamblea, que estaba compuesta por hombres independentistas. Su misión era declarar la Independencia y constituir el Estado de las provincias unidas. No logró ninguna de las dos cosas, pero sí tomó una serie de medidas muy importantes, como la abolición de la esclavitud, y oficializó dos símbolos patrios: el himno y el escudo. Además, suprimió definitivamente la advocación de que en el Río de la Plata se gobernaba en nombre de Fernando VII. Es decir, a partir de ese momento se empezó a gobernar oficialmente en nombre del pueblo. Es un antecedente fundamental de la declaración de la Independencia", detalló Luis Yanicelli, presidente del Instituto Belgraniano Tucumán.
Desconocedores
El historiador destacó que el escudo posee el mismo rango de importancia que los otros símbolos patrios y que lo llevan todos los sellos oficiales. Pero lamentó que su historia no esté más difundida. "Los argentinos somos grandes desconocedores de los símbolos de nuestra historia. Hubo generaciones que hicieron grandes cosas por la patria y acontecimientos que no se conocen y que podrían enseñarnos mucho", destacó Yanicelli.
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