10 Diciembre 2012
BUENOS AIRES.- La Corte Suprema de Justicia decidió rechazar, en forma unánime, el pedido de per saltum que formuló el Gobierno nacional para que se revoque la extensión de la medida cautelar que beneficia al Grupo Clarín para adecuarse a la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual.
El Máximo Tribunal, que se había reunido al mediodía, mantuvo un encuentro reservado esta tarde, tras el cual resolvió desestimar el planteo oficial. De este modo, el Poder Ejecutivo Nacional podría apelar la decisión mediante un recurso extraordinario. Esto prolongaría los plazos, según publicó hoy el diario "La Nación".
En el fallo, firmado por sus siete miembros, el Máximo Tribunal se abocó a analizar la nomra de per saltum impulsada por el Poder Ejecutivo Nacional, y aclaró que "el presente recurso no ha sido interpuesto contra una decisión dictada por un juez de primera instancia".
La resolución fue rubricada por Ricardo Lorenzetti, Elena Highton de Nolasco y Juan Carlos Maqueda; Carlos Fayt, Enrique Petracchi y Carmen Argibay (en un mismo fundamento) y Raúl Eugenio Zaffaroni, quien hizo una ampliación de su voto.
Tras la decisión de la Corte, Clarín mantendrá el amparo que impide al Gobierno aplicar plenamente la Ley de Medios, hasta que se resuelva la cuestión de fondo. Esta decisión está en manos del juez de primera instancia, Horacio Alfonso. El magistrado deberá determinar si dos artículos de la norma son, o no, constitucionales. El fallo podría conocerse a principios de enero, consignó el periódico.
El Gobierno esperaba el rechazo de la Corte sobre el per saltum. Sin embargo, confía que el Máximo Tribunal falle a su favor cuando tenga en sus manos el expediente por la vía del recurso extraordinario o cuando le corresponda analizar la cuestión de fondo.
La decisión respondió al pedido de la Jefatura de Gabinete, pero también rechazó, en otra medida, un planteo paralelo de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (Afsca). A la vez, dejó abierta la puerta al Gobierno para que presente un recurso extraordinario. LA GACETA ©