TEXAS, Estados Unidos.- La vagancia pudo más con Sheila Bailey Eubank, una mujer que decidió faltar a su trabajo y de excusa fingió ser secuestrada por un hombre. Pero, claro, no le salió bien la jugada. Si bien en un principio la mujer de 48 años impactó a los policías con su historia, el cuento se le acabó demasiado rápido, ya que uno de los oficiales descubrió un billete de lotería que tenía la hora en la que supuestamente estaba secuestrada.
Además, imágenes de vigilancia, tanto de la tienda donde compró el billete como del cajero automático, demostraron que la historia era un producto de su imaginación. Má tarde, Sheila confesó que no quería ir al trabajo y tuvo que mentir ya que sentía vergüenza de decirles la verdad y que la tacharan de irresponsable. Ahora, por sus mentiras, la mujer está acusada de perjurio agravado y su fianza fue fijada en 10 mil dólares. Mala pata. LA GACETA ©