25 Agosto 2012
EN MARCHA. Familiares de víctimas de la violencia doméstica y dirigentes de diferentes agrupaciones sociales arriban a la plaza Independencia.
En las páginas policiales de los diarios se ha hecho escandalosamente cotidiana la noticia de alguna mujer quemada, mutilada, apuñalada, a manos de su pareja. Un tipo de crimen que horroriza a la sociedad, pero que no debería sorprender si se tuvieran en cuenta -y se hiciera algo al respecto- lo que dicen las estadísticas sobre las víctimas de la violencia de género.
De acuerdo con los datos recogidos por la Oficina de Violencia Doméstica (OVD) de la Corte Suprema de Justicia de la Provincia, el 44% de las personas que registran denuncias por malos tratos presenta un 44% de riesgo alto y altísimo mientras que un 35% presenta un riesgo moderado y medio. En estos casos, cuando se habla de riesgo se alude a las probabilidades de que la víctima pierda la vida, como consecuencia del maltrato.
Es decir que el 79% de las personas que sufren violencia pueden terminar asesinadas si no se actúa a tiempo, con medidas de protección como, por ejemplo, la exclusión del agresor del hogar.
Esta es una de las cosas que se ha logrado a partir de la creación, en abril de 2010, de la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte, pero todavía resta llegar a todas las regiones de la provincia. También se hace necesario generar más conciencia del peligro que significa una relación de pareja teñida por la violencia a tal punto que esta se toma como algo natural.
Manifestación
Precisamente, con el objetivo de concientizar a la población y de exigir medidas concretas de protección, ayer marcharon desde la plaza Urquiza hasta la plaza Independencia, pasando por la Legislatura, familiares de mujeres asesinadas por sus parejas o ex parejas junto con distintas organizaciones sociales, culturales, sindicales y políticas. La manifestación se llevó a cabo en el marco de una jornada nacional en contra de los femicidios.
La consigna de la marcha fue "Basta de femicidios", ya que una de las metas de estas agrupaciones, y de los familiares de las víctimas, es conseguir que se incorpore la figura del femicidio (asesinato de una mujer por el solo hecho de ser mujer) en el código penal argentino. De esta manera, se puede agravar la pena del asesino, ya que actualmente es más leve si no hay un vínculo -como el matrimonio- entre el criminal y su víctima.
Los manifestantes entregaron en la Legislatura un petitorio para que se declare la emergencia en materia de violencia sexual y doméstica. Un pedido similar ya fue dejado, durante una marcha anterior, en la Corte Suprema de Justicia y en el Poder Ejecutivo.
De acuerdo con los datos recogidos por la Oficina de Violencia Doméstica (OVD) de la Corte Suprema de Justicia de la Provincia, el 44% de las personas que registran denuncias por malos tratos presenta un 44% de riesgo alto y altísimo mientras que un 35% presenta un riesgo moderado y medio. En estos casos, cuando se habla de riesgo se alude a las probabilidades de que la víctima pierda la vida, como consecuencia del maltrato.
Es decir que el 79% de las personas que sufren violencia pueden terminar asesinadas si no se actúa a tiempo, con medidas de protección como, por ejemplo, la exclusión del agresor del hogar.
Esta es una de las cosas que se ha logrado a partir de la creación, en abril de 2010, de la Oficina de Violencia Doméstica de la Corte, pero todavía resta llegar a todas las regiones de la provincia. También se hace necesario generar más conciencia del peligro que significa una relación de pareja teñida por la violencia a tal punto que esta se toma como algo natural.
Manifestación
Precisamente, con el objetivo de concientizar a la población y de exigir medidas concretas de protección, ayer marcharon desde la plaza Urquiza hasta la plaza Independencia, pasando por la Legislatura, familiares de mujeres asesinadas por sus parejas o ex parejas junto con distintas organizaciones sociales, culturales, sindicales y políticas. La manifestación se llevó a cabo en el marco de una jornada nacional en contra de los femicidios.
La consigna de la marcha fue "Basta de femicidios", ya que una de las metas de estas agrupaciones, y de los familiares de las víctimas, es conseguir que se incorpore la figura del femicidio (asesinato de una mujer por el solo hecho de ser mujer) en el código penal argentino. De esta manera, se puede agravar la pena del asesino, ya que actualmente es más leve si no hay un vínculo -como el matrimonio- entre el criminal y su víctima.
Los manifestantes entregaron en la Legislatura un petitorio para que se declare la emergencia en materia de violencia sexual y doméstica. Un pedido similar ya fue dejado, durante una marcha anterior, en la Corte Suprema de Justicia y en el Poder Ejecutivo.
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