22 Marzo 2012
Un conflicto con los integrantes de la cooperativa de clasificadores de residuos afectó ayer el servicio de recolección y de separación de los residuos en el Gran San Miguel de Tucumán. La protesta en las puertas de acceso a la planta de Pacará Pintado se inició el lunes. Según pudo averiguar LA GACETA, el malestar de los cooperativistas guarda relación con el eventual cierre de ese predio y el traslado de la actividad a un nuevo centro de clasificación en San Felipe. Desde la empresa Servicios y Construcciones La Banda SRL informaron que, en los últimos días, comenzaron a percibir que más personas pretendían ingresar al predio, lo que no fue permitido. Anoche, alrededor de las 21, el corte en las calles de acceso fue levantado. Sin embargo, la medida de fuerza de los clasificadores podría repetirse hoy en caso de que no puedan ingresar todos los "cartoneros".