18 Marzo 2012
"La poesía tiene la capacidad de rescatarnos"
"Es sinónimo de comunicación, lenguaje y escritura", afirma el poeta tucumano al referirse al género que más ha transitado. En esta entrevista habla sobre sus comienzos, su proceso de escritura y los poetas que admira. De su paso por el periodismo, recuerda una entrevista a Federico Fellini en la que éste definió al cine como "una mentira para decir la verdad".
Por Mónica Cazón
para La Gaceta - Tucumán
Los que crecimos en Tucumán, sabemos que "una tarde lluviosa y húmeda de verano", pierde su poesía en esta ciudad. Así las cosas, marché convencida, porque sabía que el esfuerzo valía la pena. Mis pasos se encontraron frente a un portero que anunciaba la visita; era ya casi de noche y apareció Juan. Impecable, sonriente, ávido; estaba frente a uno de los más destacados poetas tucumanos.
Lejos de darle comienzo a la entrevista, Juan González tomó la palabra como un experto y con total naturalidad empezó la charla. En todo momento se mostró agradecido y deferente.
- Buenas noches, Mónica; le cuento que vivía en el campo, en una finca, recién en la adolescencia me vine a vivir a Tucumán, de eso han pasado muchos años…
- Qué magnífica manera de pasar la niñez, ¿allí fue cuando comenzó a perfilarse el escritor?
-Exactamente, recuerdo las tardes y las noches. El ruido de esas oscuridades, los grillos, los pasos sobre las hojas secas. Había de todo, entonces, acostado en mi cama, imaginaba cosas y creo que las anotaba. Así comencé a escribir, sin embargo mi padre quería que fuese contador.
-¿A esa edad leía? ¿Qué tipo de lecturas prefería?
- De muy chico, lo mío era pura imaginación y los libros me interesaban mucho, pero es en la adolescencia cuando despierto a la poesía. Leía lo que caía en mis manos, recuerdo esos momentos como una etapa de descubrimiento del mundo a través de las letras. Y en cuanto a mis preferencias de esa época, claro, primero la poesía y luego los cuentos.
-¿Cree en la inspiración o en la disciplina, a la hora de escribir un poema?
- No creo para nada en la inspiración. El proceso creativo tiene que ver con las lecturas y la disciplina. Un poema, en mi caso, parte de un hecho que me conmueve, o de imágenes, que luego van conectándose con la realidad. Siempre digo y dije que la poesía es sinónimo de comunicación, lenguaje y escritura; la poesía tiene la capacidad de rescatarnos.
-¿Considera que el proceso de la corrección es importante?
- No sé en otros casos, creo que siempre es primordial dejar reposar un texto y luego releerlo. Hay una elaboración compleja en el cuerpo de un poema. Nunca dejo de corregir, ya no recuerdo quién dijo, usted sepa que a mi edad la memoria falla, bueno, decía que alguien dijo que se publica para dejar de corregir.
- Borges lo dijo, Juan, pero usted está muy bien. ¿Qué condiciones necesita para escribir, lo perturban la música, los ruidos?
- No necesito demasiado, claro que gusto de escucharme, y para eso necesito del silencio. Ocurre que la poesía tiene un ritmo y al leer en voz alta escucho el sonido del poema.
- Menciones tres autores fundamentales para su obra.
- Octavio Paz y César Vallejo siguen acompañándome a través del tiempo. Repaso esas lecturas y nunca dejan de asombrarme, es algo que todavía no comprendo.
- ¿De qué se arrepiente y qué lo hace feliz?
- Ah, bueno, no me arrepiento de muchas cosas porque actué de acuerdo a mis convicciones. Pensé las cosas que dije. Y con respecto a la felicidad, en fin, no sé, me hacen bien los caramelos de miel, por ejemplo.
-¿Para qué sirve un escritor?
- No sé para qué sirve, no lo sé. Podría decirle que sirve porque entretiene, en algunos casos, porque muestra una realidad diferente, porque hace pensar o reflexionar o reír. Un escritor es también un mago; aparte de ser un hombre responsable que debe hacerse cargo de lo que dice, y en el momento en que lo hace.
- Usted se ha destacado también como periodista, recuerda alguna entrevista o artículo que lo haya impresionado?
-Sí, el periodismo es algo importante para un escritor. En Europa me dediqué al periodismo de tipo cultural, tengo una visión difusa pero especial de una charla con Onetti, creo que fue en París; y otra con Fellini, cuando me acerqué a preguntarle "¿qué es el cine?" Y me respondió claramente "el cine es una mentira para decir la verdad".
- Vamos a terminar la entrevista, Juan; elija cómo le gustaría hacerlo.
- Con un poema, Mónica, un poema.
"Autorretrato grotesco"
Aguafuerte de Nieves Viadero *
Estuvo también en el infierno
de ahí le quedaron
algunas lenguas que todavía
iluminan su cerebro
y hacen crac
cuando mueve los brazos
de su cintura sale un calor
que ni las llamas
¿qué será ese calor
con olor a melaza?
arre arre dice y tira de la
soga de su cuero
ella sabe que la soga es
su piel tan sonido
de campana que sale de sus
orejas cuando tenía siete años
¿eran siete los años de su campa?
ahí está la rueda que
chirriaba por la presión del
alambre sobre la rueda
que la lleva despacio o
a gran velocidad por la campa
ella no puede dejar de crecer
ni de mirar su cuerpo
que era una vara de mimbre
agitada por el viento o por los
adolescentes que la devoraban
como una fresa
el hambre de los otros la asediaba
y quedó fascinada
cuando vio por primera vez
una palabra escrita por su dedo
y no dejó de crecer
tampoco su dedo
aunque a veces tropezaba
con la escritura de las piedras
o con las cuernas del país
sumergido en el Atlántico
ella fue mediterránea
costera en el centro
con peces en la boca o
relámpagos que iluminaban su casa
de madera o
la mesa donde escribía sus sueños.
* Juan E. González, de su libro De ella se decía.