24 Marzo 2011
JERUSALÉN- Una bomba colocada en los alrededores de las estación central reinstaló ayer el terror en Jerusalén. El saldo fue de un muerto y 39 heridos después de siete años sin ser objetivo de atentados con artefactos explosivos. La explosión, activada a través de un teléfono móvil, se produjo en los alrededores de la concurrida estación de ómnibus, en una de las rutas con más tráfico de la ciudad, la que da entrada a Jerusalén desde Tel Aviv. La bomba fue colocada en una bolsa en una parada de autobús e impactó sobre una línea de transporte urbano. Una mujer israelí de 59 años murió poco después de la explosión y más de una treintena de personas tuvieron que recibir asistencia médica. Tres de ellas están graves.
La detonación se escuchó en gran parte de la ciudad sembrando un caos que Jerusalén no vivía desde los atentados con excavadoras en 2008 y el perpetrado por un terrorista suicida en 2004. Mientras la policía y los servicios de rescate trataban de restablecer el orden en Jerusalén, en Gaza miles de personas enterraban ayer a los ocho muertos que dejaron 13 ataques aéreos del ejército israelí. Los medios locales relacionaron ambos ataques en un momento en que la violencia entre el ejército israelí y las milicias palestinas de la Franja de Gaza escala de forma vertiginosa desde el fin de semana pasado. El gran detonante fue el lanzamiento de 50 granadas al sur de Israel desde Gaza -el sábado-. Israel respondió con los ataques más duros desde la operación "Plomo Fundido", en diciembre de 2008 y enero de 2009. Ningún grupo reivindicó aún el ataque. (DPA)
La detonación se escuchó en gran parte de la ciudad sembrando un caos que Jerusalén no vivía desde los atentados con excavadoras en 2008 y el perpetrado por un terrorista suicida en 2004. Mientras la policía y los servicios de rescate trataban de restablecer el orden en Jerusalén, en Gaza miles de personas enterraban ayer a los ocho muertos que dejaron 13 ataques aéreos del ejército israelí. Los medios locales relacionaron ambos ataques en un momento en que la violencia entre el ejército israelí y las milicias palestinas de la Franja de Gaza escala de forma vertiginosa desde el fin de semana pasado. El gran detonante fue el lanzamiento de 50 granadas al sur de Israel desde Gaza -el sábado-. Israel respondió con los ataques más duros desde la operación "Plomo Fundido", en diciembre de 2008 y enero de 2009. Ningún grupo reivindicó aún el ataque. (DPA)