Una tragedia alejará del cuarteto a Sebastián

Una tragedia alejará del cuarteto a Sebastián

El auto que transportaba al "Monstruo" chocó de frente en la ruta 336 contra un motociclista, que murió prácticamente en el acto. El músico, su esposa, su representante y el chofer del auto sufrieron heridas. "Nunca había vivido algo así". Consternación.

GOLPES Y UNA FRACTURA. El Monstruo Sebastián fue asistido de urgencia en el Hospital Padilla. LA GACETA / HECTOR PERALTA GOLPES Y UNA FRACTURA. "El Monstruo" Sebastián fue asistido de urgencia en el Hospital Padilla. LA GACETA / HECTOR PERALTA
24 Mayo 2010
Se recostó en el césped, agitado y magullado. Vio cómo las llamas devoraban el auto en el que había viajado; a metros de allí quedó una moto, totalmente destrozada. Gotas de sangre le habían manchado la camisa floreada y el pantalón. Lo tenía a mal traer un dolor punzante en el pie; pero más le preocupaban su esposa y los demás heridos.

En ese pastizal, entre la neblina de un paraje de Burruyacu, "El Monstruo" Sebastián decidió volver a ser Daniel Humberto Reina. "Pasé un susto muy grande. A los diez minutos del accidente, me senté y decidí no cantar más. Nunca había vivido algo así", contó el cantante cordobés, ya en la guardia del Hospital Padilla, en diálogo con LA GACETA.

Debido al terrible choque, producido ayer a la mañana, un motociclista perdió la vida.

Durante la madrugada, "El Monstruo" Sebastián, de 55 años, había brindado un espectáculo en la localidad santiagueña de Nueva Esperanza. "Dimos un único recital, que terminó a las 4. Salimos; cenamos algo y después partimos", dijo el músico. Venían hacia San Miguel de Tucumán, donde tenía pactada otra función. El cuartetero ya venía madurando la idea de retirarse, pero lo que pasó horas después precipitó su decisión.

Presentimiento

Miguel Humberto Colarte, de 31 años y oriundo de Banda del Río Salí, conducía el Chevrolet Corsa que trasladaba al cantante. En el asiento del acompañante iba su representante, Walter Fernando Ortiz (44), quien reside en Buenos Aires. "El Monstruo" Sebastián viajaba en la parte trasera, junto a su esposa, Viviana Graciela Brochero (42).

Cuando el auto iba por la ruta 336, a la altura de la entrada a Burruyacu, el cordobés intuyó que algo malo podía suceder. "Pasamos por un arreglo que había en la ruta y había mucha neblina. Todavía no había amanecido. Por cómo estaban las cosas, pensé que lo ideal sería quedarme en el primer hotel que encontráramos. Pero a los pocos minutos pasó todo", dijo.

La tragedia se produjo cerca de las 7, a 300 metros del cruce con la ruta 304.

Ariel Domingo Brito, de 32 años, manejaba una Gilera 110 cc hacia el este. Se cree que la neblina ocasionó que chocara de frente contra el Corsa.

El motociclista, oriundo de la localidad de Villa Benjamín Aráoz, murió casi en el acto.

"Yo no vi nada, pero sentí el impacto en el parabrisas. Fue un estampido muy fuerte. El chofer trató de girar y el auto empezó a dar tumbos. Yo había estado en algunos accidentes; pero ver vidrios destrozándose de esta forma... escuchar cuatro voces que piden auxilio... la verdad, nunca me había pasado algo así", agregó Sebastián, acongojado.

Luego del vuelco, el Corsa comenzó a arder rápidamente. El conductor pudo abrir la puerta. Pero las demás personas habían quedado atrapadas. "Tuve que romper la luneta trasera para poder salir. Después, saqué a mi señora y a mi representante. El auto quedó destrozado", recordó el cuartetero.

Un tractorista que pasaba por el lugar vio el terrible escenario y llamó a la Policía con su celular. "Nuestros teléfonos habían quedado adentro del auto y se prendieron fuego", explicó Sebastián.

Colarte y Ortiz fueron trasladados al Centro de Salud. El cantante y su esposa, al Padilla. Los cuatro sufrieron heridas, pero no son graves. Sin embargo, quedaron en observación.

"El Monstruo" recorrió las rutas del país durante 35 años. Ayer sintió que era momento de ponerle punto final a su extensa carrera. "Creo que la precaución siempre es necesaria. He ido de Ushuaia a la Quiaca, y no me había pasado esto. El destino tiene un porqué. Me voy a tomar un descanso de 30 días; vengo haciendo discos, vengo viajando. Yo puedo estar fatigado, pues debo componer, cantar y otras cosas. Pero un chofer tiene que estar descansado. Siempre exijo que, mientras yo estoy en el escenario, el chofer duerma. Si no, te pasa como a Rodrigo, que tuvo que poner la llave y manejar él para llegar al recital", reflexionó.

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