27 Diciembre 2009
DESCANSO. Díaz regresó al "Jardín" para pasar Navidad en familia. A sus padres les regaló la crónica de sus goles. LA GACETA / OSVALDO RIPOLL
Cuando Leandro Nicolás Díaz decidió abandonar la provincia y probar suerte en la gran ciudad, nunca imaginó que a fines de este 2009 viviría tantas sensaciones hermosas. El pibe nacido en Villa Amalia, y que durante cuatro temporadas jugó en Atlético, es una de las figuras más prometedoras que exhibe Lanús en sus divisiones inferiores.
El centrodelantero es hijo de Juan Carlos Díaz, un atacante que en la década del 80 jugó en Central Norte. El 8 de diciembre pasado vivió el momento más emocionante de su carrera. Ese día, Gabriel Schurrer le dio la posibilidad de ser titular en la final de Quinta división contra River. Para demostrar que le sobra pasta para jugar en un nivel superior -tiene edad de Sexta- Díaz contribuyó con tres conquistas en la goleada por 4 a 0 sobre los "millonarios".
"Fue lo mejor que me pasó desde que estoy en el club. Debe ser también porque lo conseguí en un momento clave de mi carrera. Sabía que no podía desaprovechar la oportunidad. El técnico confió en mí, me subió de categoría y, por suerte, le rendí", comentó el ariete. La Navidad fue plena para "Leo". Luego de los éxitos deportivos, sus representantes le compraron un auto para que pueda trasladarse desde la casa de su tío, donde reside, hasta el predio de entrenamiento de Lanús.
"Antes de venir para pasar las fiestas en casa, en el club me comunicaron que no planifique las vacaciones -reveló-. Es firme la posibilidad de que sea citado para realizar la pretemporada con el plantel profesional. No lo puedo creer".
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