El Gobierno admite la gravedad de la epidemia de dengue e insta a "descacharrizar" las casas

El brote de dengue que afecta el norte del país es el peor de la historia, según reconocieron los especialistas. En Tucumán por primera vez se registra una epidemia y los expertos afirman que por causa del cambio climático los habitantes deberán prepararse para la llegada de otros males reemergentes como el paludismo y la fiebre amarilla.
El director de Epidemiología del Sistema Provincial de Salud (Siprosa), Rogelio Cali, dijo que Tucumán nunca sufrió una epidemia de dengue como la que registra ahora. "Siempre hubo casos aislados e importados; nunca autóctonos. En 2004 y 2005 fueron las últimas veces que se detectaron tres o cuatro casos", comentó el funcionario.
No obstante, remarcó que como consecuencia de la tropicalización del clima, los tucumanos tendremos que acostumbrarnos a estas epidemias. "Cada vez estaremos más expuestos a estas enfermedades. Y no sólo al dengue, sino también a la fiebre amarilla y al paludismo", advirtió.
El funcionario señaló que este brote de dengue no se podía predecir. "Es como un tsunami, cuando se presenta, arrolla", comparó. Y añadió que la herramienta más eficaz para la prevención está en manos de la población. Se refirió a la campaña que se lleva adelante en todos los barrios y que entre los especialistas del Siprosa llaman "Descacharreo" o "El fin del cacharro sentimental".
Los agentes sanitarios apuntan a que los vecinos se deshagan de todos los recipientes que puedan estar en el patio de las viviendas y que puedan acumular el agua de lluvia. Este es el sitio ideal para la reproducción del mosquito Aedes Aegypti, que transmite el dengue.
"Hay que sacar todos los recipientes que a uno le da lástima tirar y que amontona en el fondo de la casa", recomiendan los expertos. El principal consejo de los médicos a los vecinos es eliminar el agua que pueda acumularse en floreros, cacharros, chatarras, gomas viejas y tapas de gaseosas.

Los casos
Hasta ayer en Tucumán se habían registrado 348 casos de dengue entre sospechosos y confirmados (la cifra crece a un promedio de 100 casos nuevos por día). Sólo en Aguilares se detectaron 238. Ya hay casos autóctonos en La Cocha y en Cruz Alta (se suman a los que se detectaron en la capital, Yerba Buena, Aguilares y Chicligasta).
En medio de esta situación, ayer se suspendió la fumigación aérea con perimetrina que iba a realizar la Municipalidad de Alderetes, porque el Siprosa no la autorizó. Por ahora continuarán los trabajos preventivos casa por casa en esa ciudad.
Los médicos advirtieron que si se extreman las medidas preventivas hay posibilidades de evitar una gran diseminación de la enfermedad. En la provincia sólo se encontró el tipo 1 de dengue, que no es muy peligroso. Los casos más riesgosos de la enfermedad, se produjeron en personas que fueron picadas por mosquitos con dos tipos de dengue distintos.