Reabren viejas heridas en España

MADRID.- La Audiencia Nacional suspendió ayer la apertura de las fosas comunes de las víctimas de la Guerra Civil y el franquismo hasta que se resuelva si el juez Baltasar Garzón es competente para investigar estos crímenes. La medida, solicitada por la Fiscalía, fue adoptada por los 15 magistrados que integran la Sala en lo Penal de la Audiencia Nacional, quie celebraron una reunión extraordinaria por este motivo. La fiscalía había formulado el planteo el jueves, inmediatamente después de que el magistrado Santiago Pedraz, que reemplaza a Garzón por cuestiones de salud, autorizó la exhumación de varios cadáveres de republicanos enterrados en el Valle de los Caídos, donde también se encuentran los restos del dictador Francisco Franco. Asimismo, Pedraz permitió que la familia de Federico García Lorca, una de las decenas de miles de víctimas del franquismo, pudiera estar presente en la apertura de la fosa del poeta.

Reacción fulminante
Con la misma celeridad con la que actuó la Fiscalía, la mayor asociación de familiares de víctimas de la Guerra Civil española y del franquismo (1936-1975) recurrirá la decisión de la Audiencia Nacional, principal instancia penal española. “Seguiremos abriendo fosas; no hay ley que lo pueda impedir porque tenemos el derecho del mundo de saber dónde están nuestros familiares”, dijo Emilio Silva, titular de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH). Para hoy tienen previsto abrir una fosa en la que se cree que están enterradas 11 personas en la provincia de Huelva (Andalucía, sur), aunque esta no está incluida en la lista de las 25 que Garzón ha autorizado hasta el momento.
Silva sospecha que la decisión judicial tiene que ver en parte con la política, ya que el gobierno español se opone a que Garzón investigue las más de 114.000 desapariciones, que considera crímenes contra la humanidad. Además, alegó, el gobierno socialista no ha hecho hasta ahora mucho caso a las legislaciones de derecho humanitario internacional.
En cuanto a la apertura de la fosa de Federico García Lorca, a lo que la familia del poeta se opone, Silva recordó que esta se puede oponer legalmente y no lo ha hecho. “Si quieren dejar el cuerpo allí, lo pueden hacer”, estimó, pero advirtió que un crimen no se resuelve si a un familiar le apetece o no, sino que por ley se investiga. (AFP-Télam)