El grupo de hackers, que se autodenomina el Equipo Griego de Seguridad, se burla en su mensaje de la debilidad del LHC, y llama "colegiales" a los técnicos responsables de proteger la seguridad informática de la instalación donde el pasado miércoles se inició lo que muchos consideran el experimento científico más ambicioso de la Historia.
Los piratas afirman en su mensaje que su intención no es provocar daño alguno al acelerador de partículas, sino llamar la atención sobre la debilidad de sus ordenadores.

Según un investigador del CERN que no quiso develar su nombre, los hackers estuvieron a sólo un paso de penetrar en el sistema de control de uno de los cuatro grandes detectores de partículas del acelerador, el llamado CMS, una inmensa estructura magnética de 12.500 toneladas que mide 21 metros de alto y 15 metros de ancho.
Esta fuente anónima aseguró que si hubieran logrado introducirse en esta red informática, podían haber interrumpido el funcionamiento de buena parte de sus componentes, según "El Mundo".

"Esta máquina es enormemente compleja, y si ya es difícil hacerla funcionar de por sí, no digamos si encima alguien encima empieza a sabotear el sistema", aseguró el científico del CERN.
Los piratas griegos iniciaron su ataque a la misma hora en la que el pasado miércoles los investigadores del CERN inyectaron por primera vez un haz de protones en el núcleo del acelerador: un túnel de 27 kilómetros en el que se recrearán las condiciones que existieron inmediatemente después del Big Bang.
Mientras centenares de científicos y periodistas presenciaban el primer ensayo general del LHC, los responsables del proyecto tuvieron que montar un pequeño gabinete de crisis para aislar y eliminar la media docena de archivos que los hackers consiguieron introducir en el sistema informático del acelerador.
"Lo que ocurrió no fue grave, pero demuestra que siempre hay gente que puede convertirse en una amenaza", reconoció al diario británico otro investigador del CERN.