Cartas de lectores
28 Agosto 2008
DEFENSORIA DEL PUEBLO
Quiero destacar la rapidez y la eficacia con la que el defensor del Pueblo reemplazó los focos incandescentes por los de bajo consumo en el edificio donde funciona el organismo que él preside. Ahora, como consumidora y ciudadana me siento más defendida. Habría que ver si las otras reparticiones imitan esta acción que, en definitiva, es para el bien de todos. La importante medida que adoptó el funcionario surgió a causa de mi preocupación, que hice pública en una carta que apareció en esta sección, en la hacía notar que, en el edificio de la Defensoría, había lámparas incandescentes, lo que conspiraba contra el reclamo de las autoridades de ahorrar energía eléctrica. Y preguntaba yo: si el Estado no da el ejemplo con el ahorro de electricidad, ¿cómo puede proponer que el resto lo haga? ¿O acaso -finalizaba- no somos todos los que le pagamos a EDET lo que la provincia consume en energía?



CULTURA
Llama notablemente la atención la cantidad de personas que, como por arte de magia, aparecieron estos últimos días solidarizándose con la gestión de un funcionario que, se supone, algo tendría que haber hecho por la Cultura. Atarse al carro de cada gobierno, atribuirse méritos de otros, o pretender justificar lo injustificable (“sólo ocho meses” como colaborador técnico de alguien juzgado por delitos de lesa humanidad) no tendría que ser la labor de quien maneja la imagen cultural de la provincia. Ya se habló hasta el hartazgo de su incompetencia, comprobada a lo largo de este 2008, sin ir más lejos (fracaso de público en el Mayo de las Letras, por falta de conocimiento y por errores de programación; stand de Tucumán en la Feria del Libro en Buenos Aires, sin libros y sin escritores, además de otras “delicadezas”, aunque sólo me permito hablar de literatura) así como del bochorno ideológico que lo sustenta (los asesinos y los hombres probos parecen ser para él la misma cosa). Tras el Congreso de Cultura, que se llevará a cabo en octubre de este año en Tucumán, organizado por la Nación, Mauricio Guzman pretenderá quedarse con los laureles de algo que se hace en nuestra provincia pero que se planea y se decide desde un ministerio de la Presidencia. Me pregunto, entonces: ¿qué hicimos para merecer funcionarios como este director del Ente Cultural; o, mejor dicho, qué hicimos para que algún ente, de espaldas a  la Cultura, nos dirija?

Rogelio Ramos Signes
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PERROS AGRESIVOS
Recomiendo a las personas que viven en Tafí Viejo y que salen a pasear con sus mascotas, que no pasen nunca por la cuadra de Reconquista al 200 porque se arriesgan a que sus perritos mueran destrozados bajo las fauces de un enorme rottweiler que acecha en la vía pública. Bajo la complacida mirada de su dueño, este feroz animal va matando más de 30 perritos pequeños y medianos que atrapó cuando pasaban por la calle. En una ocasión, una mujer pasaba llevando en brazos a un bebé y a su lado iba una nena con un pequeño perro. El rottweiler los atacó, mató al perrito y derribó a la niña, produciéndoles, además del daño físico, un severo trauma emocional a las víctimas. Hace poco, este mismo animal dejó malherido a un viejo perro callejero que había sido adoptado por una vecina, quien con su magro sueldo de maestra pagó los gastos en la veterinaria para salvarle la vida. Y en el lugar se siguen produciendo casi a diario otros casos tan dramáticos como los relatados. Las denuncias que se radicaron ante la Policía (Unidad Regional Norte) no tuvieron resultado. El dueño del animal es propietario de un complejo habitacional donde residen familias con niños, y es de temer que en cualquier momento ocurra una tragedia como la que horrorizó hace poco a los tucumanos, cuando un perro de esta misma raza mató a un bebé que vivía en la misma casa.

Nelly Elena Xamena
25 de Mayo 219
Tafí Viejo (Tucumán)

JUICIO (I)
Una vez más, después de algunos años, la vida me sorprende escribiendo una carta abierta a mi padre, frente a la sociedad tucumana. Una vez más, por esas cosas del destino (ejercicios militares, Vietnam, obligaciones familiares y laborales, entre otras), las circunstancias no nos permiten estar físicamente juntos en momentos trascendentales de nuestra historia, aunque espiritualmente lo estemos más que nunca. Una vez más, el legado que dejaré algún día a mis hijos me obliga a decirte: gracias papá. Gracias por ofrecer tu vida en el campo de batalla -en aquellos años de la década del 70 en que vivimos todos juntos en Tucumán- para ofrecernos la libertad de la que hoy gozan mis hijos. Porque todos sabemos, aunque algunos se hagan los distraídos, que Tucumán estaba destinada a una dictadura marxista siguiendo el modelo de Cuba. Todos sabemos que la provincia fue declarada “zona liberada” por los grupos subversivos y con proyección nacional. ¿Quién, sino un revanchista, puede negar que vivimos una guerra? Gracias papá por permitirme con tus actitudes demostrarles con orgullo a mis hijos, Martín, Luis y Victoria, ya adolescentes, durante este circo que llaman juicio oral, que los que no pudieron ganarte en el monte y en las urnas en tantas oportunidades hoy impulsan; que aquel “cuento” del soldado valiente es una realidad; que ese hombre a quienes llaman Tata y ahora depende de un tubo de oxígeno, se defiende con la verdad y es objeto de orgullo propio sin el “cuento” de su madre. Porque sí, papá, tus nietos, hombres y mujeres que en un futuro próximo serán testigos de la historia que se escriba, están también orgullosos y agradecidos. Para finalizar, lamento darles importancia a dichos de quien me da vergüenza que sea fiscal de la Nación; pero debo decirles a él y a la sociedad tucumana que sí, que llevo tu sangre, que heredé todo aquello a lo cual quiera referirse, y que no es cobardía, pero que estoy orgullosa de ello, y que dudo de que sus hijos algún día puedan decir lo mismo.

María Fernanda Bussi
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JUICIO (II)
Cuando se habla de los desaparecidos, algunos recuerdan las muertes de la guerrilla. Pero estas muertes (toda muerte es horrible) no justifican el secuestro de cientos o miles de personas sacadas indefensas de sus casas, llevadas a centros clandestinos de detención, torturadas, asesinadas, ocultados sus cuerpos, negada toda información (¡ni siquiera devolvieron los cuerpos!). Nada justifica esta atrocidad, tampoco el argumento de una guerra. Aun la guerra tiene sus reglas de respeto al prisionero; pero fueron sacados indefensos. ¿Dónde está la guerra? Si querían neutralizar a un adversario, con detenerlo y llevarlo a una cárcel habría bastado. Pero eligieron el camino tenebroso de la desaparición. Así se consumó una despiadada cacería de opositores y disidentes. Los propios militares saben que hicieron algo horrendo. Por eso niegan los hechos, porque estos son indefendibles. Está bien que se castigue el horror y se reconozca la dignidad humana de las víctimas.

Carlos Severino Soldati
La Rinconada
Simoca (Tucumán)

ZANJON POLONIO
A causa de la obra en construcción de un country en La Rinconada, se ha tapado el cauce del zanjón Polonio. Esto producirá desbordes de barro a la ruta, con consecuencias nefastas para los automovilistas.

José Argañaraz
[email protected]

Las cartas para esta sección deben tener un máximo de 200 palabras, en caso contrario serán sintetizadas. Deberán  ser entregadas en Mendoza 654 o en cualquiera de nuestras corresponsalías haciendo constar nombre y domicilio del remitente. El portador deberá concurrir con su documento de identidad. También podrán ser enviadas  por e-mail a: [email protected], consignando domicilio real y Nº de teléfono y de documento de identidad. LA GACETA se reserva el derecho de publicación.

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