22 Agosto 2008
Un muerto y 20 heridos fue el trágico saldo que dejó el acto político del 9 de julio, organizado en el hipódromo de Tucumán, que tuvo por única oradora a la Presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, quien compartió el palco con su anfitrión, el gobernador José Alperovich.
La víctima fatal fue el taficeño Juan Miguel Valdez, quien murió aplastado por una tribuna que se derrumbó. La fiscala Adriana Giannoni instruye la causa que se abrió para investigar el hecho. La viuda de Valdez, Lucía Seifer, y su hijo, Fernando David Valdez, pidieron ser querellantes en ese expediente, por medio de sus representantes legales Ramiro Cabral y Manuel García Fernández.
Entre las víctimas que sobrevivieron al desplome, uno de los más afectados fue Diego Armando Andrada. El joven de 14 años, también taficeño, estuvo internado en el hospital Padilla, donde los médicos le anunciaron que no podrá realizar esfuerzo físico, ni siquiera para trabajar. Por eso, sus familiares piden una pensión graciable para él.
En el acto del 9 de julio también resultó herida Micaela Agüero, de 11 años. La niña se fracturó el brazo cuando se cayó la tribuna. Tiene seis hermanos y su madre, Magdalena Agüero, está separada y sólo recibe una pensión de $ 600, por familia numerosa. Le ofrecieron $ 15 para ir al hipódromo y, por llevar a todos sus chicos le dieron sólo $ 15 más. Perdió los $ 30 en la campera que la niña extravió, con su calzado, cuando se produjo el derrumbe.
Antes, el 18 de junio, en Buenos Aires, el luleño Carlos Marriera, de 21 años, había muerto en Plaza de Mayo. Esperaba el inicio del acto del PJ, que también tuvo a Cristina como única oradora, cuando le cayó una farola.
La víctima fatal fue el taficeño Juan Miguel Valdez, quien murió aplastado por una tribuna que se derrumbó. La fiscala Adriana Giannoni instruye la causa que se abrió para investigar el hecho. La viuda de Valdez, Lucía Seifer, y su hijo, Fernando David Valdez, pidieron ser querellantes en ese expediente, por medio de sus representantes legales Ramiro Cabral y Manuel García Fernández.
Entre las víctimas que sobrevivieron al desplome, uno de los más afectados fue Diego Armando Andrada. El joven de 14 años, también taficeño, estuvo internado en el hospital Padilla, donde los médicos le anunciaron que no podrá realizar esfuerzo físico, ni siquiera para trabajar. Por eso, sus familiares piden una pensión graciable para él.
En el acto del 9 de julio también resultó herida Micaela Agüero, de 11 años. La niña se fracturó el brazo cuando se cayó la tribuna. Tiene seis hermanos y su madre, Magdalena Agüero, está separada y sólo recibe una pensión de $ 600, por familia numerosa. Le ofrecieron $ 15 para ir al hipódromo y, por llevar a todos sus chicos le dieron sólo $ 15 más. Perdió los $ 30 en la campera que la niña extravió, con su calzado, cuando se produjo el derrumbe.
Antes, el 18 de junio, en Buenos Aires, el luleño Carlos Marriera, de 21 años, había muerto en Plaza de Mayo. Esperaba el inicio del acto del PJ, que también tuvo a Cristina como única oradora, cuando le cayó una farola.