22 Junio 2008
ADIOS. Ortega se marchó de la práctica, enojado con el DT Simeone. FOTO REUTERS
BUENOS AIRES.- Ariel Ortega anunció esta tarde que dejará de jugar en River, molesto por la decisión del entrenador Diego Simeone de excluirlo del equipo para enfrentar a Banfield.
"Los periodistas sólo dicen una parte y no lo del cuerpo técnico. Y me hago cargo de una parte, pero no me voy porque quiero sino porque me tengo que ir", señaló Ortega en declaraciones a América TV.
El delantero adoptó la decisión a media mañana sin previo aviso y por el momento se desconoce su paradero.
La decisión de marginar a Ortega del equipo está vinculada a una nueva recaída en su adicción al alcohol, que obligó al entrenador impedirle entrenarse el sábado junto al resto del plantel.
En ese marco, Ortega abandonó la práctica, se refugió en la concentración del club y durmió durante buena parte de la jornada sin tomar contacto con el resto de sus compañeros y el cuerpo técnico.
El jujeño, quien recientemente renovó su contrato con River por un plazo de dos años, lucha sin éxito desde hace tiempo contra su adicción al alcohol.
La falta de compromiso para avanzar en el tratamiento de su enfermedad y la falta de profesionalismo tensó la relación con Simeone y el resto del plantel profesional.
En ese sentido, son varios los dirigentes que en la intimidad reconocen que “El Burrito” es una mala influencia para los jugadores más jóvenes de River.
Hoy Ortega iba a participar de los festejos por la obtención del torneo Clausura en el marco de la presentación del campeón ante Banfield en la última fecha del Clausura.
Ahora, la situación del jujeño es sumamente delicada y no son pocos lo que aseguran que su futuro en el club está en riesgo. (NA)
"Los periodistas sólo dicen una parte y no lo del cuerpo técnico. Y me hago cargo de una parte, pero no me voy porque quiero sino porque me tengo que ir", señaló Ortega en declaraciones a América TV.
El delantero adoptó la decisión a media mañana sin previo aviso y por el momento se desconoce su paradero.
La decisión de marginar a Ortega del equipo está vinculada a una nueva recaída en su adicción al alcohol, que obligó al entrenador impedirle entrenarse el sábado junto al resto del plantel.
En ese marco, Ortega abandonó la práctica, se refugió en la concentración del club y durmió durante buena parte de la jornada sin tomar contacto con el resto de sus compañeros y el cuerpo técnico.
El jujeño, quien recientemente renovó su contrato con River por un plazo de dos años, lucha sin éxito desde hace tiempo contra su adicción al alcohol.
La falta de compromiso para avanzar en el tratamiento de su enfermedad y la falta de profesionalismo tensó la relación con Simeone y el resto del plantel profesional.
En ese sentido, son varios los dirigentes que en la intimidad reconocen que “El Burrito” es una mala influencia para los jugadores más jóvenes de River.
Hoy Ortega iba a participar de los festejos por la obtención del torneo Clausura en el marco de la presentación del campeón ante Banfield en la última fecha del Clausura.
Ahora, la situación del jujeño es sumamente delicada y no son pocos lo que aseguran que su futuro en el club está en riesgo. (NA)
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