20 Febrero 2008
MAS EQUIPOS. Cristina Kirchner entregó equipos a la Policía Federal. DYN
Buenos Aires.- La presidenta Cristina Kirchner pidió a la Policía Federal que redoble sus esfuerzos en el combate del delito, a fin de revertir la sensación de incertidumbre y de inseguridad profunda que sufre la gente.
“Es vital, para encarar con éxito la lucha contra el crimen, que la ciudadanía confíe en su policía. Por ello, los convoco a todos ustedes a poner todo el esfuerzo, el compromiso y la honestidad para combatir un delito que es cada vez más complejo y que crea esa sensación de incertidumbre e inseguridad profunda en la gente”, sostuvo.
La mandataria se dirigió a los agentes en el acto de entrega de patrulleros a la fuerza realizado en el Rosedal de Palermo. La presidenta Kirchner indicó que este modo se podrá reconstituir la confianza de la ciudadanía ante quienes son los responsables de bregar por su seguridad.
“Estoy convencida de que, si seguimos articulando esfuerzos, si continuamos invirtiendo y con cada uno de ustedes que han elegido esta profesión, la de servir y cuidar a los demás, vamos a lograr reconstituir la confianza de la ciudadanía en la institución”, apuntó.
En su primer acto junto a la fuerza de seguridad desde que asumió la primera magistratura del Estado, Cristina remarcó que su Gobierno no puede ignorar la demanda creciente de la sociedad en materia de seguridad.
Reunión
Por otra parte, un grupo de madres de las víctimas de la tragedia en el boliche República Cromagnon sorprendió a la Presidenta, a quien abordaron fuera de todo protocolo al concluir el acto y consiguieron que la jefa de Estado les prometiera una audiencia.
Margarita Aramayo de Novoa, madre de dos chicas que fallecieron durante el incendio ocurrido el 30 de diciembre de 2004, se paró frente al palco oficial y visiblemente nerviosa se dirigió a Kirchner.
Cristina escuchó atentamente a Novoa y poco después dio directivas a una asistente para pedirle todos los datos y luego contactarse con los familiares, para atender el reclamo.“Las entiendo”, dijo y de inmediato pidió un vaso de agua para calmar a Novoa.
La mujer, entre sollozos, le explicó a la presidenta: “estamos un grupo de papás, ustedes se tienen que hacer cargo de algo que fue tan grande como Cromagnon, nuestras familias están destrozadas”. (NA)
“Es vital, para encarar con éxito la lucha contra el crimen, que la ciudadanía confíe en su policía. Por ello, los convoco a todos ustedes a poner todo el esfuerzo, el compromiso y la honestidad para combatir un delito que es cada vez más complejo y que crea esa sensación de incertidumbre e inseguridad profunda en la gente”, sostuvo.
La mandataria se dirigió a los agentes en el acto de entrega de patrulleros a la fuerza realizado en el Rosedal de Palermo. La presidenta Kirchner indicó que este modo se podrá reconstituir la confianza de la ciudadanía ante quienes son los responsables de bregar por su seguridad.
“Estoy convencida de que, si seguimos articulando esfuerzos, si continuamos invirtiendo y con cada uno de ustedes que han elegido esta profesión, la de servir y cuidar a los demás, vamos a lograr reconstituir la confianza de la ciudadanía en la institución”, apuntó.
En su primer acto junto a la fuerza de seguridad desde que asumió la primera magistratura del Estado, Cristina remarcó que su Gobierno no puede ignorar la demanda creciente de la sociedad en materia de seguridad.
Reunión
Por otra parte, un grupo de madres de las víctimas de la tragedia en el boliche República Cromagnon sorprendió a la Presidenta, a quien abordaron fuera de todo protocolo al concluir el acto y consiguieron que la jefa de Estado les prometiera una audiencia.
Margarita Aramayo de Novoa, madre de dos chicas que fallecieron durante el incendio ocurrido el 30 de diciembre de 2004, se paró frente al palco oficial y visiblemente nerviosa se dirigió a Kirchner.
Cristina escuchó atentamente a Novoa y poco después dio directivas a una asistente para pedirle todos los datos y luego contactarse con los familiares, para atender el reclamo.“Las entiendo”, dijo y de inmediato pidió un vaso de agua para calmar a Novoa.
La mujer, entre sollozos, le explicó a la presidenta: “estamos un grupo de papás, ustedes se tienen que hacer cargo de algo que fue tan grande como Cromagnon, nuestras familias están destrozadas”. (NA)
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